Muchos ciudadanos se preguntan por la eficacia de estos despligues policiales que no son permanentes
Tras tres días del confinamiento perimetral en Salamanca capital, vecinos de la ciudad que tienen que salir por motivos laborales o habitantes del alfoz y de otros lugares que deben venir han podido comprobar que los controles de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Policía Local no son permanentes. Es decir, que se montan durante unos periodos determinados, fundamentalmente en las horas en las que se esperan más desplazamientos, en los accesos seleccionados, pero se retiran en otras partes del día.
Así, un ejemplo de esto es que, debido a uno de esos controles, el sábado por la mañana se acumulaba el tráfico en la rotonda de la Aldehuela, junto al puente Juan Carlos I, que separa Santa Marta de Tormes de Salamanca. Sin embargo, en esa misma jornada, alrededor de las 15.00 horas, se podía circular con total normalidad en el citado acceso a la capital.
Y lo mismo pasa en otras carreteras que comunican Salamanca con el Alfoz y los polígonos de Carbajosa y Villares de la Reina. Es decir, que los controles no son permanentes con lo que el famoso confinamiento perimetral es muy relativo.
Fotos de Lydia González