Los niños completan la inmersión en el mundo del clown que les ha propuesto el Divierteatro

La Plazuela del Buen Alcalde de Ciudad Rodrigo vivió durante la mañana del sábado la 4ª y última jornada del Divierteatro de la Feria de Teatro de Castilla y León 2020, edición que será recordada como aquella en que el recinto estuvo lejos de ser la gran y bulliciosa fiesta habitual por culpa de las medidas de restricción social a la que obliga el coronavirus.

Pese a todo, se ha podido hacer, como resaltaba en la mañana del sábado su responsable, Miriam Hernández, como conclusión asimismo del proceso de formación llevado a cabo un verano más con jóvenes, que han tenido que trabajar en grupos independientes, aislados unos de otros, para reducir los riesgos de contagio. Asimismo, tanto monitores como equipo de apoyo han tenido que mantener cierta distancia con los niños que han pasado por allí.

Esta última mañana del Divierteatro estuvo marcada por el frío, ya que el viento que empezó a soplar en la tarde-noche del viernes ha provocado una drástica bajada de temperaturas, que se ha agravado en esta jornada sabatina. De este modo, aunque lució el sol, la mayoría de los niños y monitores llevaron alguna prenda de abrigo para completar la inmersión en el mundo del clown realizada a lo largo de estos días, con el objetivo de que todos los involucrados conociesen lo que significa este tipo de teatro y el mundo de los payasos, cómo se construyen estos personajes, y la cultura general en torno al clown.

Como en las jornadas anteriores, a lo largo de la mañana sabatina el protagonismo principal recayó en los espectáculos de pequeño formato, con una novedad respecto a los otros días: la compañía palentina Garrapete (que en días previos ofreció cuentacuentos para niños de 3 a 5 años en el jardín del Palacio de Montarco) ofreció la pieza Teckla&Teclof, dentro de la Carpa La Berta que ha presidido la Plazuela del Buen Alcalde.

Además, hubo nuevos pases del espectáculo Conociendo al mejor Payaso del Mundo de Jes Martin's Producciones, en el que el actor Jesús Martín se mete en la piel de un payaso; y de la pieza Jimmy Briste, el payaso triste que ha ofrecido el incombustible Denis Rafter en 'su' Patio de Cerralbo. En la mañana del sábado, además de la pieza en sí (en la que se habla de la historia de payasos famosos), se formó una interesante charla posterior en uno de los pases que ofreció el actor y director irlandés, al que asistieron numerosos monitores.

Como en las mañanas anteriores, la última sesión del Divierteatro 2020 se completó con la realización de varios juegos en espacios específicos para ello en el corredor derecho de la Plazuela; mientras que en su zona de soportales izquierda hubo las habituales mesas para los talleres plásticos y artísticos. En esta jornada, los chavales participantes tuvieron la oportunidad de fabricarse un sombrero de payaso con el material recibido.