En su informe abordan, ante el reinicio de la actividad educativa, medidas que van desde los controles de temperatura, la exposición a personas infectadas o los síntomas en el colegio
"Los horarios escolares y laborales deben facilitar la conciliación para evitar que los abuelos, o familiares convivientes de edad avanzada o vulnerables, tengan que asumir la tarea de llevar y traer a la casa a sus nietos". Así lo recoge el informe sobre la 'Reapertura de los centros educativos ante la reactivación del Covid-19', de la Comisión Asesora del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos, y que recoge una serie de recomendaciones e indicaciones básicas para el reinicio de las actividades en los centros educativos. Estas medidas abordan desde los controles de temperatura, la exposición a personas infectadas o los síntomas en el colegio hasta cómo afrontar esta situación en estudiantes con discapacidad o en situaciones vulnerables.
"La inminente apertura del sector educativo preocupa a toda la sociedad, ya que incrementa la interacción y contactos entre personas, y, si no se gestiona correctamente, puede suponer incrementar los riesgos de contagio para los estudiantes y profesores, así como para las familias y la comunidad", apunta la Organización Médica Colegial (OMC), subrayando que "ante la inquietud y desasosiego que esta situación produce" es una prioridad social y sanitaria" la apertura de los centros educativos; las autoridades, tanto escolares como sanitarias, deben asegurar que esto se produzca de manera ordenada y segura".
Entre las principales medidas destacan: Distanciamiento físico, higiene de manos frecuente, y uso correcto de la mascarilla; dotación y formación suficiente para dar respuesta a los nuevos requerimientos organizativos de las clases: Profesorado, limpieza, y profesionales para la atención a la diversidad; evitar contactos con superficies como pomos de las puertas dejándolas abiertas; mantener abiertas algunas ventanas, aunque la climatización esté activada, es una medida prudente para facilitar la dispersión de aerosoles; y grupos pequeños de niños y además fijos (burbuja).
Asimismo, consideran fundamental los circuitos bien delimitados de vigilancia epidemiológica para detección precoz de casos y aislamiento de casos y contactos.
En lo que respecta al transporte al colegio "debe ser lo más seguro posible, y en el caso del transporte escolar asegurar asientos fijos para cada niño, uso de mascarillas, y apertura de ventanillas."
Por su parte, el sector sanitario debe combinar su apoyo al sector educativo, con el control de cadenas de contagio y brotes, y la prestación de la atención sanitaria a los enfermos. "La potenciación de la Atención Primaria y la Salud Pública son esenciales, y no están siendo materializadas con la intensidad y la voluntad política que sería deseable en todos los lugares", apuntan los médicos. "Algunas funciones van a ser básicas en esta etapa: la atención pediátrica en los Centros de Salud, las actividades de rastreo para casos y contactos, y la disponibilidad de instrumentos y medios para que los aislamientos y las cuarentenas puedan realizarse efectivamente".
Por último, aunque no por ello menos importante, "es esencial desarrollar una comunicación clara y cercana a padres, familiares y tutores, que permita entender cómo van a funcionar los centros escolares, particularmente el escalonamiento de las entradas y salidas, y de los recreos; también se debe insistir en estimular que en el domicilio se extremen las medidas higiénicas para asegurar la protección de niños y adultos".