Autobuses, trenes y aviones imponen restricciones al viaje con mascotas
Hasta 9 de cada 10 españoles prefieren ir de vacaciones con su perro en lugar de hacerlo solos. Algo que no nos extraña si tenemos en cuenta que el perro es nuestra mascota preferida (frente al resto de Europa, donde salen ganando los mininos). En cuanto al medio de transporte favorito, el 85% se decanta por el coche frente a otros como el tren o el avión, cuyos adeptos se reducen al 11,4% y al 3% respectivamente.
En esta decisión intervienen varios factores: el desconocimiento de los usuarios y las restricciones de las compañías de transporte. Por ejemplo, la propia Renfe circunscribe su servicio a las mascotas de menos de 10 kilos. En los trenes de larga distancia, además, es necesario comprar un billete para ellas. Las limitaciones que encontramos en las aerolíneas son similares, aunque varían según la entidad. En el caso de los autobuses, la mayoría acota su traslado al maletero.