El secretario general del sindicato UGT ha afirmado que el Gobierno "está obligado a tomar medidas con carácter inmediato"
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, cree que es la hora de reactivar "inmediatamente" el consumo para salvar los empleos que "están en el aire" pendientes de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) o aquellos puestos que han desaparecido como consecuencia de un despido o la finalización de un contrato temporal. En una entrada de su blog sindical, el máximo representante de la organización ha afirmado que el Gobierno "está obligado a tomar medidas con carácter inmediato".
"Nuestras fábricas de coches están casi paralizadas por la ausencia de demanda, nuestros establecimientos turísticos, en un plazo muy próximo, ya no solo se enfrentan a los riesgos del rebrote, sino a la carencia de clientes", ha resaltado Álvarez, tras apuntar que miles de empresas han reducido su producción y empleo "por falta de demanda".
Desde su punto de vista, ya no es suficiente con sostener el tejido productivo mediante ERTE y exoneraciones de cotización. De hecho, cree que ahora hay que impulsar el desarrollo de la economía productiva del país.
Para ello, considera que no es necesario "inventar demasiado" y que basta con contemplar lo que están haciendo los países del entorno de España, que están favoreciendo el consumo de los productos que son fabricados y producidos en el propio país mediante medidas indirectas, además de destinar cantidades "ingentes" de dinero al sostenimiento de aquellas empresas estratégicas que se encuentran en riesgo de desaparición por la crisis.
Así, apuesta por impulsar planes renove focalizados en el aumento del consumo de aquellos productos que generan empleo, en dar bonos o ayudas para estimular el turismo el territorio español o en utilizar instrumentos fiscales en la forma y por el periodo necesarios.
Pero también aboga por planes de certificación de calidad o por promoción de marca. Para Álvarez, son necesarias medidas combinadas con aquellas necesarias que eviten la desaparición de empresas críticas y que impulsen "una rápida salida de la crisis y permitan desarrollar posteriormente las herramientas para construir un nuevo modelo a medio y largo plazo".
También ha dejado claro que los sindicatos quieren participar en todo este proceso, porque, junto a las patronales, los agentes sociales "han demostrado tener una madurez ejemplificadora en estos momentos".
"No vamos a ser los comparsas ni la coartada de un conjunto de planes más o menos coordinados. Queremos discutir las medidas, negociarlas y si es posible acordarlas. Queremos y podemos aportar mucho. Ahora", ha incidido.
Por todo esto, esta semana las organizaciones sindicales, en un encuentro celebrado el pasado jueves, han exigido al Gobierno que abra todas las mesas del diálogo social que se pactaron antes del inicio del estado de alarma. "Nos jugamos mucho todos y nuestro papel no va ser el de silentes aplaudidores de las medidas que se decidan o no tomar", ha dejado claro.