Reclaman que unan esfuerzos para tomar medidas para ayudar a "los más frágiles"
Los obispos españoles han pedido a los políticos que dejen a un lado "egos, intereses particulares e ideologías" para "llegar a acuerdos" en medio de la pandemia por el coronavirus COVID-19, y que tomen medidas para ayudar a "los más frágiles".
Así lo reclaman en un mensaje de la Subcomisión de Acción Caritativa y Social de la Conferencia Episcopal Española (CEE) publicado este lunes 11 de mayo, con motivo de la festividad del Corpus Christi, Día de la Caridad, que se celebrará el domingo 14 de junio. Los obispos hacen un llamamiento a las autoridades políticas, civiles, económicas y religiosas.
"Necesitamos personas con mucha paciencia, con la mirada puesta en los más frágiles de nuestra sociedad, y con una firme voluntad de llegar a acuerdos y de aplicarlos. Que exista esa voluntad, es hoy lo más importante. Pedimos a todos los ciudadanos que ayuden a hacer posible un diálogo constructivo y eficaz. Oramos para que los muros sean superados, para que los egos, los intereses particulares y las ideologías sean dejadas a un lado", subrayan los prelados.
Los obispos recomiendan a los interlocutores que "cuando se encuentren juntos en la misma sala, se miren a los ojos" y sientan la llamada del "adelante, ustedes pueden"; que este gesto "facilite el acercamiento de posturas" y disipe "el virus de la división, el diabolos, que estará siempre al acecho".
Por otro lado, en su mensaje, los obispos se defienden frente a aquellos que se preguntan dónde está la Iglesia en estos momentos, y les invitan a "dirigir su pregunta a los pobres, a los enfermos, a los discapacitados, a los que están solos, a los ancianos abandonados, a los que buscan sentido en medio de la oscuridad, a los que han perdido un familiar querido, a tantos que buscan a alguien que les escuche".
En concreto, destacan la labor de Cáritas y de otras entidades de la Iglesia en los hospitales, los comedores, los centros de acogida y las residencias de ancianos. También subrayan el trabajo de tantos médicos, enfermeros, auxiliares, transportistas, farmacéuticos, policías, militares, "muchos de ellos católicos". La Iglesia, según precisan, está realizando su servicio "con humildad, sin pretender ocupar las primeras páginas de los periódicos".
Se trata, según precisan, de "los santos de al lado" que ayudan a "muchas personas" que están sufriendo momentos de "dolor y desánimo, al igual que los discípulos de Emaús", no solo los que están padeciendo las consecuencias físicas, sociales o económicas del coronavirus sino también los que van "sin rumbo" a causa de "desengaños amorosos, fracasos personales, por creerse autosuficientes o porque, sencillamente, no encontraron sitio en una sociedad tremendamente competitiva".
SEMANAS DE "AYUNO EUCARÍSTICO"
Asimismo, los prelados celebran que, tras "semanas" sin misas con público, de "ayuno eucarístico", y sin la celebración de las Primeras Comuniones, se vuelva a "una cierta normalidad", ya que en las provincias que han pasado a la fase 1 pueden retomarse las misas con fieles. En todo caso, precisan que sta participación será "progresiva y estará condicionada por el cumplimiento de las condiciones de aforo y de las normas".
Finalmente, los obispos recuerdan a los que han fallecido por la infección del virus y rezan por el fin de la pandemia del coronavirus "y de tantas otras pandemias que a veces quedan lejanas pero que provocan sufrimiento a muchos hermanos y hermanas de aquí y del mundo entero". Precisamente, llaman a no olvidar a los pobres y excluidos de las periferias.