Desde el inicio del confinamiento, la delegación salmantina ha prestado ayuda a 1.086 personas y 428 familias
Cáritas Diocesana de Salamanca se está esforzando por seguir ofreciendo sus servicios a los desfavorecidos y por ello refuerza su atención durante la crisis del coronavirus. Según la organización: "se ha organizado la atención de todos los recursos para dar respuesta y no dejar a ninguna persona ni familia al margen". La organización afirma recibir numerosas peticiones de ayuda e intentan cubrir el máximo posible, ya sea con atención teléfonica o en los dos centros que permanecen abiertos al público, las casas de acogida Samuel y Padre Damián.
Desde que empezó el confinamiento, 16 de marzo, un total de 66.766? se han destinado para esta causa, y hemos podido apoyar a 1.086 personas y 428 familias. Es una primera respuesta ante unos datos alarmantes que nos hablan de una situación complicada, especialmente para las personas que ya se encontraban antes en situación de precariedad y/o exclusión social. Durante este tiempo, Cáritas se ha coordinado con el Ayuntamiento, la Diputación de Salamanca y con otras entidades sociales y eclesiales para que, en la medida de lo posible, ninguna familia, se quede sin la atención necesaria.
Desde Cáritas señalan que seguirán trabajando por la sociedad salmantina:
Este virus nos envía un mensaje claro: de la noche a la mañana todo puede cambiar, todos somos vulnerables. Todo es frágil. La única manera de salir adelante es vivir en comunión, haciéndonos responsables unos de otros, siendo conscientes de ser parte de un todo, experimentando que nuestras acciones, por pequeños gestos que puedan parecer, cambian la suerte de quienes nos rodean. El pasado jueves, Día del Amor Fraterno, recordábamos que sólo el amor todo lo puede, que nos puede hacer vencer situaciones extremas como la que estamos viviendo. Sólo con la conciencia de ser una única familia humana, y que nos lo jugamos todo en el cuidado mutuo, podremos salir de esta.