Estas organizaciones aseguran que el personal sanitario y de vigilancia de las cárceles prestan servicio sin equipos de protección individual
Los sindicatos de prisiones han presentado una denuncia contra Instituciones Penitenciarias por la "falta de medidas" de protección en las cárceles por el coronavirus y han alertado de la tensión creciente entre los presos por la decisión del Ministerio del Interior de prohibir permisos y comunicaciones.
Una situación que también se da en el Centro Penitenciario de Topas (Salamanca). Además, Acaipl solicita el cese de las actividades de los talleres productivos, "ya que ello implica entrada de personal de los empleados de las empresas adjudicatarias al Centro Penitenciario, totalmente injustificadas e innecesarias que además de vulnerar el decreto del Estado de Alarma, pone en riesgo la contención que debemos de proporcionar en materia sanitaria, a un medio cerrado y vulnerable como lo es una prisión, además de generar un malestar entre la población reclusa a la cual no se les permite
comunicar con sus familiares y en cambio ven, como entra personal de la calle totalmente
prescindible".
Personal sanitario y de vigilancia de las cárceles sin equipos de protección individual
Así lo ha informado CSIF mediante un comunicado en el que explican que CC.OO y Acaip/UGT también se han sumado a esta denuncia ante la Inspección de Trabajo en la que aseguran que el personal sanitario y de vigilancia de las cárceles prestan servicio sin equipos de protección individual.
Asimismo, desde los sindicatos advierten que las medidas adoptadas por Interior de suspensión de permisos de salida, comunicaciones en locutorios o vis a vis se han convertido en "factores desencadenantes de tensión" entre los presos. Aseguran que estos hechos han provocado incidentes en las cárceles de Foncalent (Alicante), Albocaser (Castellón) y Puerto.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, dictó una orden el pasado domingo para aíslar todas las cárceles españolass prohibiendo los permisos de salida y también las comunicaciones, aunque en compensación se potenciarían las telefónicas.
Desde la entrada en vigor de la orden se suspendieron todo tipo de permisos ordinarios y de salidas. En el caso del 100.2 sólo se permite para los internos que se hallen destinados en centros de inserción social, secciones abiertas o centros ordinarios.
Al margen del 100.2, se suspendieron todas las comunicaciones ordinarias, dada la limitación de la libertad de circulación que tienen las familias y amigos que visitan a los internos. Asimismo, se suspendieron todas las salidas de permiso, programadas y cualquier otra salida, salvo por causas de fuerza mayor o situación de necesidad.