Cerca de 11.000 personas acudirán al tradicional acto, que se mantiene, ya que las autoridades sanitarias no han dicho lo contrario
En torno a 11.000 personas se acercaron el año pasado al besapiés de Jesús Rescatado, en la iglesia de San Pablo, una tradición que se celebra cada primer viernes de marzo, y que en esta ocasión, tendrá lugar este 6 de marzo, desde las 00.00 horas, con el inicio de una eucaristía, para después iniciar el besapiés.
A pesar de que actos similares se han cancelado en algunas ciudades españolas, como medida preventiva por el coronavirus, en Salamanca la Congregación mantiene la cita, ya que las autoridades sanitarias no han dicho lo contrario.
Así, este viernes, por la mañana, a las 8.00 horas tendrá lugar la primera de las eucaristías, y así de manera interrumpida cada 60 minutos hasta las 13:00 horas del primer tramo de la jornada, en concreto, a las 9:00, 10:00, 11:00, 12:00 y 13:00 horas. Por la tarde, se reanudan las eucaristías a las 17:00 y hasta las 21:00 que comenzará el Vía Crucis.
Medidas de higiene
En cuanto a las medidas de higiene, el hermano mayor apunta que son las habituales de cada besapiés: "Como el pie de la imagen está protegido con un metacrilato siempre echamos antiséptico en los pañuelos que utilizamos para evitar contagios de virus, y de esta forma sabemos que no se daña la talla", subraya Sánchez Tabernero.
Ante los casos de Coronavirus en España, este responsable apunta a que no se realizará medidas de excepción, "porque el antiséptico ya lo utilizábamos antes". En este sentido, el hermano mayor relata que en siglos pasados, en la época de la peste, "la gente venía al Rescatado a pedir por ello, para no ser contagiados".
El hermano mayor de la Congregación, Emilio Alberto Sánchez Tabernero, detalla que en esta ocasión se ha invitado a participar a las hermandades de la Junta de Semana Santa de Salamanca. Además, los fieles tendrán a su disposición a lo largo del día a diferentes confesores y el besapiés se desarrollará de manera ininterrumpida hasta las doce de la noche.
Foto Diócesis de Salamanca