Las dos universidades de Salamanca cuentan con varios equipos en la principal liga virtual universitaria en la que, periódicamente, se disputan emocionantes derbys
Cuando se nos vienen a la cabeza pugnas entre universidades, la obvia es la que cada año libran Oxford y Cambridge en las regatas. Una rivalidad convertida ya en tradición, en acontecimiento social y en fenómeno de alcance global.
Esa rivalidad ha existido siempre entre casas de estudios cercanas y también entre aquellas que gozan de un prestigio similar. A lo largo de la historia al ser humano siempre le ha gustado medir las capacidades, hacer clasificaciones y coronar al campeón. Quizá por eso existen tantos rankings universitarios de diferentes tipos. Para contentar a todo el mundo.
En Salamanca presumimos de dos catedrales, asistimos a la 'batalla' entre dos equipos de fútbol, y atesoramos dos universidades de enorme prestigio. Una de ellas, la Universidad de Salamanca, avalada por nada más y nada menos que 800 años de trayectoria. A muy pocos metros de su edificio histórico, la Universidad Pontificia.
Más allá de algunas diferencias en los despachos, más evidentes en otras épocas, la cordialidad ha marcado esa relación y así sigue siendo aunque sin perder de vista una sana rivalidad, que, en pleno siglo XXI, ya apenas se dirime en pistas de atletismo o en partidos del Trofeo Rector -que también- sino que tiene un nuevo escenario de competencia, el de los eSports o deportes virtuales.
La competencia ha llegado al mundo virtual a través de University Esports, una competición virtual entre universidades de toda España que se enfrentan en seis disciplinas diferentes (Teamfight tactis, CS:GO, Brawl Stars, Hearthstone, League of Legends y Clash Royale). La prioridad, explica Rubén Maribona, uno de sus coordinadores, es que los participantes sigan estudiando, que no se distraigan de su tarea principal "porque esto es un entretenimiento secundario". A sus 21 años, este estudiante de Ingeniería Informática del campus zamorano de la USAL, ejerce también de abanderado provisional del equipo de la vetusta Casa de Estudios en esa liga virtual entre universidades. Son los Frogs, una referencia directa a la emblemática rana, y desde que hace un año juegan la competición universitaria, han logrado movilizar a cerca de 200 participantes. Algunos, auténticos especialistas en los juegos más populares del mundo.
Cada temporada de University Esports se divide en dos splits. El primero, desde octubre a enero. El segundo, desde febrero a mayo. Los Frogs de la USAL aterrizaron en la liga en el segundo split de la pasada temporada, la cuarta. En la actualidad está a punto de comenzar el segundo de la quinta temporada de enfrentamientos. Y habrá morbo porque las dos universidades salmantinas están, esta vez sí, encuadradas en el mismo grupo. Medirán sus fuerzas en League of Legends (LOL).
La Ponti, pionera
El equipo de la UPSA llego antes a los videojuegos. Se hacen llamar los Towers y su relaciones públicas es Santiago Baltar, gallego, estudiante de Ingeniería Informática y jugador de los buenos. Al contrario que su homólogo de la USAL, que solo coordina pero no participa en las competiciones por falta de tiempo, Baltar es, a día de hoy, el mejor jugador del Salamanca de uno de los juegos más populares, aunque no se incluye en el catálogo de competiciones de la liga universitaria. Se trata de Super Smash Bros. Bajo el Nick Thortunator, Baltar ocupa el puesto 40 en el ranking nacional y a sus 20 años sueña con ser jugador profesional.
Hasta que ese sueño se cumpla, despliega todos sus encantos como jefe del equipo virtual de la Universidad Pontificia. Cada año pide permiso a las autoridades académicas para colocar información por las diferentes facultades e, incluso dar charlas por las clases en busca de jugadores una labor de captación que en la última temporada ha dado sus frutos. Hoy por hoy, más de 50 jugadores representan a la UPSA. Una labor muy similar, conocida en el argot como Rutiversity, es la que Rubén Maribona ha desarrollado en la USAL, donde ha encontrado a menudo a la universidad como aliada. "Siempre nos han dado facilidades para poder explicar quiénes somos y siempre somos bien recibidos", reconoce. En ese aspecto, agradece como coordinador la labor de los abanderados -que ahora ejerce de forma provisional- "porque nos ayudan muchísimo y con ellos todo son facilidades".
Además de captar jugadores en la UPSA, Santiago organiza los equipos, coordina horarios y es un nexo entre los diferentes conjuntos y University Esports, empresa a la que representa Maribona en la zona de Salamanca. Esa marca ha ido ganando adeptos poco a poco y también patrocinadores. El último en llegar, Amazon, que ofrece a sus ayudantes en las diferentes universidades dádivas en forma de premio virtual y a los jugadores jugosos premios que pueden llegar hasta los 40.000 euros.
Tanto Santiago en la Pontificia como Maribona en la USAL están también detrás de la selección de aquellos jugadores que van a representar a cada universidad. El primer paso es una liga interna en la que los equipos vencedores se convierten en representantes de cada centro educativo en la liga nacional de universidades. Ni Frogs ni Towers están, hoy por hoy, entre los mejores "pero siempre hacen un papel digno". Todo camino tiene su inicio.