Los dos toros protagonistas de la capea volverán a salir a las calles en el encierro de este Sábado
El carrusel de sucesivos estrenos de la jornada inaugural del Carnaval 2020 incluyó con la medianoche del Viernes al Sábado ya atravesada la primera salida de toros a la Plaza Mayor mirobrigense, en la clásica capea nocturna que un año más llevó hasta el ágora a varios miles de personas, entre ellos muchos jóvenes, para disfrutar de una gran velada festiva.
Numerosos de esos jóvenes optaron, en vez de por subirse a un tablao, por quedarse en la arena para ser partícipes de la fiesta allí desatada, que contó en primer lugar con un balón como gran elemento animador, y posteriormente con la Charanga Santana, que estuvo tocando alrededor de media hora con muchísimos jóvenes a su alrededor. Un grupo de ellos, por cierto, ondeó la emblemática bandera de Moderdonia, la 'ficticia' república creada por el programa La Vida Moderna de la Cadena SER que presenta David Broncano junto a Quequé e Ignatius Farray.
A medianoche, la Charanga desalojó la Plaza, empezando a sonar cinco minutos después el Reloj Suelto, para que los mozos cogiesen las barreras que serán su ubicación en el coso durante estos Carnavales. Diez minutos más tarde, llegó por fin el momento de que pisasen la arena de la Plaza los dos primeros astados del Carnaval 2020 (obviamente, de uno en uno) pertenecientes a la ganadería de Adelaida Rodríguez.
Ambos astados permitieron entretenerse a recortadores y novilleros, en lo que fue su primera intervención en este Carnaval, porque hay que recordar que esos dos toros también saldrán a la calle este Sábado en el encierro que tendrá lugar a las 13.00 horas (en total se soltarán 5 toros, todos de la misma ganadería). La capea se desarrolló sin incidentes reseñables, de tal modo que no hubo ningún herido.
Hay que apuntar como añadido que la capea de la noche del Viernes (con una aceptable temperatura para las fechas del año en que nos encontramos) supuso el estreno de la nueva puerta de seguridad de la calle Julián Sánchez, que tiene como finalidad que, en caso de que un astado salte o rompa esa puerta, no vaya calle adelante.