En esta vía se encontraba, a principios del pasado siglo XX, un famoso salón de baile que se llamó Niza y después Iris, que duró hasta los años de la posguerra
El callejón de Pinto va desde la calle de su mismo nombre, con la que forma ángulo recto, hasta la plaza de San Cristóbal. El nombre de la calle como el de otras muchas de Salamanca, le debió venir probablemente de algún taller artesanal cuyo dueño a finales de la Edad Media, tuviera este apellido o apodo.
En este callejón se encontraba, a principios del pasado siglo XX, un famoso salón de baile que se llamó Niza y después Iris, que duró hasta los años de la posguerra.
Los domingos por la tarde se celebraban bailes al compás de una orquestina. Hubo también otro salón llamado, El Ramillete de Flores, de duración más efímera.
Estos salones, sobre todo el llamado Iris, se empleaba en múltiples ocasiones para mítines políticos o banquetes ocasionales. Más tarde fue almacén de muebles de González del Rey y actualmente es una vecindad de casas.
Fotografía:
Imagen del interior de uno de los salones del café Iris, situado en la Calleja de Pinto.
Fuente texto: Callejero Histórico de Salamanca.