Esta reducción, según el portavoz del PSOE, José Luis Mateos, está incluida en su programa pero también en los de PP y Ciudadanos
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Salamanca llevará al próximo pleno la petición de que el Consistorio modifique la ordenanza del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para que "las familias" paguen un cinco por ciento menos.
Esta reducción, que según el portavoz del PSOE, José Luis Mateos, está incluida en su programa pero también en los de PP y Ciudadanos -estos dos últimos componen el Gobierno Municipal-, ha de hacerse de manera "inmediata" y no al final de la legislatura.
Además, ha reseñado que la propuesta del Partido Socialista incluye que la bajada no sea con carácter generalizado sino para viviendas de naturaleza urbana de tipo residencial, de ahí el término "familia" utilizado por Mateos y por el edil Marcelino García.
De esta forma, tal y como han explicado ambos socialistas, la bajada del cinco por ciento no afectaría al IBI que pagan "hipermercados y empresas de grandes grupos empresariales", que quedarían exentos de la reducción por situarse en el diez por ciento de inmuebles de mayor valor catastral.
Según Mateos, una nueva bajada generalizada sería como la aprobada para el último ejercicio, que supuso un ahorro para las grandes superficies de 20.000 euros en 2019 mientras que para los vecinos se quedó en "un euro al mes", algo que ha calificado como "injusto".
En cuanto al motivo de proceder ya a una nueva bajada y no esperar al último año de legislatura, el portavoz del Grupo Municipal Socialista ha dicho que de hacerse ahora los vecinos podrán ahorrarse a final de mandato unos 80 euros, que se quedarían en unos 18 euros de ser solo efectiva en el último ejercicio.
El portavoz socialista ha reseñado que un ahorro general del cinco por ciento supondría una bajada en los ingresos municipales de 43 millones, una rebaja que se podría "mitigar" en torno al 25 por ciento si no contempla la reducción en los inmuebles de mayor valor catastral.