Su situación económica o laboral no se lo permite o los precios de compra no encajan con su presupuesto son otros de los argumentos
La falta de ahorros es el principal motivo para retrasar la compra de una vivienda, tal y como refleja el informe 'Radiografía del mercado de vivienda' 2018/19 realizado por Fotocasa. De hecho, es el argumento que esgrime el 32%, mismo porcentaje que los que apunta que su situación económica o laboral no se lo permite. Estudio que también constata que "la subida de precios en el mercado de vivienda hace más difícil disponer de los ahorros necesarios para lanzarse ya a la compra". De ahí que la decisión de adquirir una vivienda en propiedad se postergue, especialmente entre los jóvenes que demandan más viviendas en alquiler (y a precios asequibles a los actuales salarios) mientras reúnen lo suficiente para la compra. De hecho, un 17% señala que los precios de compra no encajan con su presupuesto, y para un 15% los precios están muy altos, confiando en que los mercados se normalizarán en los próximos años. Hay otro dato, el 6% reconoce que el banco no le concede la hipoteca, porcentaje que ha aumentado en 3 puntos en el último año.
¿Compensa más pagar una hipoteca que un alquiler
La subida imparable de los alquileres en nuestro país nos devuelve a un escenario ya conocido, y es la percepción de que compensa más pagar una hipoteca que un alquiler. De hecho, según los datos de la radiografía del mercado de la vivienda, así lo considera el 63%, ocho puntos más que en 2018. Un porcentaje elevado, un 56% (frente al 53% en 2018), también considera que comprar una vivienda es una buena inversión.
Las fuertes subidas de precios en el arrendamiento son, como señala este informe, "un poderoso argumento que tienen a favor quienes defienden la conveniencia de la compra". Pero también "generan una sensación de preocupación por la evolución del mercado inmobiliario", y de hecho, el 48% de los particulares considera que estamos próximos a una nueva burbuja inmobiliaria.