Es importante que la familia y allegados conozcan el deseo de ser donantes, para que autoricen la extracción de órganos tras el fallecimiento
Según la Ley de trasplantes, en España todos somos considerados donantes de órganos si en vida no hemos expresado lo contrario. Sin embargo, esa expresión puede haber sido formulada de diferentes modos, lo que obliga a que se pregunte a familiares o allegados sobre la voluntad del fallecido respecto a la donación (consentimiento familiar). En la práctica siempre se respeta la decisión de la familia, ya que se asume que estos no contradirían los deseos de su ser querido. Es, por tanto, importante que la familia y allegados conozcan el deseo de ser donantes, para que autoricen la extracción de órganos tras el fallecimiento.
Como documento que testimonia la voluntad de donar se puede solicitar la tarjeta de donante (a través de la web de la ONT o en la web www.saludcastillayleon.es donde encontrará el formulario a rellenar).
Sin embargo, la tarjeta no tiene valor legal. Es preciso comunicar a nuestros familiares el deseo de ser donantes, ya que siempre se va a preguntar a la familia sobre la voluntad del fallecido respecto a la donación.