El resto estaban en mal estado
Agentes del Servicio de la Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil han detenido a un hombre de 40 años por abandonar en una finca de la localidad cacereña de Alcántara sin agua ni comida, a 18 caballos, que presentaban un estado de "extrema delgadez", y de los que uno de ellos falleció.
La actuación ha sido posible gracias a la colaboración ciudadana, por la que los agentes tuvieron conocimiento el pasado 16 de julio de la existencia en una finca situada en el término municipal de Estornino-Alcántara, de 18 animales equinos de distintos sexo y edad, uno de ellos ya muerto.
En ese momento, agentes del Seprona se desplazan, junto a veterinarios de la Junta de Extremadura, a la finca donde encontraron a los equinos en "extrema delgadez", que describen como "inaudita y terrorífica".
Añade la Guardia Civil que la "extrema delgadez" que presentaban los caballos y la "caquexia acuciada" de algunos de los equinos, "hacía presagiar que de no acometer medidas urgentes, sobre todo de hidratación, la situación de muchos de ellos sería irreversible".
De hecho, en el lugar se halló una yegua muerta, que por su estado, hizo pensar a los facultativos que la muerte se había producido escasas horas antes.
Durante la inspección realizada en toda la finca, los agentes no encontraron ningún tipo de abrevadero con agua, si bien, existía una charca, sin agua, con barro aún húmedo, un barro que "tenían varios potros en la cabeza, signo inequívoco de la búsqueda desesperada del líquido elemento".
Para intentar paliar los daños en los animales, la Guardia Civil solicitó la colaboración del Ayuntamiento de Alcántara, que trasladó de forma inmediata una cuba de agua de 600 litros a la finca, que tuvo que ser suministrada a los equinos según instrucciones de los facultativos de la Junta de Extremadura "de manera pautada para evitar el sobreconsumo ante el riesgo de que los animales sufrieran un colapso".
Por este motivo, este proceso duró varias horas y en el que participaron tanto Guardia Civil como veterinarios y operarios del Ayuntamiento.
Finalmente, ha detenido un vecino la localidad cacereña de Mata de Alcántara, acusado de un delito de abandono y maltrato animal, ya que era el encargado de la custodia y mantenimiento de los caballos, cuyo propietario, residente en Almería, tras ser informado de la situación se trasladó de forma inmediata al lugar y tomó las medidas necesarias para el bienestar de los animales.
No obstante, la Guardia Civil advierte de que continúa observando para que "se cumplan las medidas mínimas de salubridad y alimentación de los equinos", mientras las investigaciones continúan abiertas y no se descartan nuevas actuaciones.