Miguel Soler Gallo mostrará la olvidada lucha por la igualdad de Mercedes Formica

El miércoles 15 de mayo a las 20:00 horas, en el Salón de Actos de la Biblioteca de la Casa de las Conchas, tendrá lugar la presentación del libro 'A instancia de parte y dos obras más'(2ª ed. 2018. Editorial Renacimiento) de la abogada y escritora Mercedes Formica (1913-2002). El responsable de la edición, Miguel Soler Gallo, doctor por la Universidad de Salamanca y especialista en la autora, destaca la importancia de devolver a la actualidad estas producciones que, en la década de los cincuenta del pasado siglo, sirvieron para promover una insólita campañaa favor de los derechos de la mujer y de los niños, víctimas de unas leyes diseñadas para salvaguardar los intereses del varón, aunque este fuese 'culpable'. Se trata dela novela corta 'Bodoque', publicada entre 1944-45 en la revista 'Escorial', nunca editada en formato libro, el cuento 'La mano de la niña', divulgado en 1951 en 'Clavileño', y la novela 'A instancia de parte', publicada en 1955.

En su narrativa, Formica mostraba su compromiso con los más débiles y trasladaba a un plano ficcional casos que había conocido en su propia familia y en las mujeres que trataba como abogada especializada en víctimas de violencia machista, una de las tres juristas en activo en el Madrid de los años 50. En 'Bodoque' y en 'La mano de la niña' se aprecian las consecuencias que padecían los hijos ante la aplicación de una ley que, en caso de quebrar el matrimonio de los padres, no velaba por el bienestar de estos ni por sus intereses, sino que les obligaba a vivir alejados de parte de la familia, por lo que se generaban lagunas insalvables.

El adulterio es el tema crucial de 'A instancia de parte'. Como recuerda Miguel Soler, el adulterio fue castigadoduramente en la mujer (salvo en el período republicano), y que, además de ser delito (con pena de prisión menor), como causa de ruptura del matrimonio, conllevaba la activación de la humillante figura del 'depósito de la mujer casada'(por considerarse el domicilio'casa del marido'), un precepto legal, que estuvo siempre en las leyes españolas (la Ley de divorcio de 2 de marzo de 1932 mantuvo tal precepto), y que seguía hasta la celebración del juicio, que podía durar años; es decir, años de encierro para la mujer en un convento de arrepentidas a la espera de la sentencia definitiva, sin que se llegase a dilucidar nunca si había cometido o no adulterio, pues podía haber sido víctima de una canallesca encerrona. La novela expone citas tan valientes como: 'La ley es una trampa dispuesta para que caigamos en ella las mujeres' o 'Los jueces se dejan llevar por las apariencias', que revelan el espíritu combativo con el que fue confeccionada. Por ello, necesitó dos informes de censura para obtener la aprobación pertinente.

Estas obras, fundamentalmente 'A instancia de parte', contribuyeron a que se efectuase la reforma del Código Civil, y de otros cuerpos legales, que la abogada había impulsado a través de artículos, entrevistas y conferencias, y que tuvo su recompensa cuando el 24 de abril de 1958 se modificaron 66 artículos que acercaron en derechos a la mujer respecto al hombre. Por iniciativa del abogado Antonio Garrigues, esta reforma ?la primera llevada a cabo para incluir derechos para las mujeres desde su promulgación en 1889? fue denominada 'la reformica', en un simpático juego de palabras con su apellido. Entre otros aspectos, se suprimió el 'depósito de la mujer casada' y, por consiguiente, la 'casa del marido' pasó a ser el domicilio conyugal, de forma que la mujer, en caso de solicitar la separación, podía quedarse en ella; la mujer pudo ejercer como testigo en testamentos y desempeñar los cargos de tutora o protutora, a la viuda casada en segundas nupcias no le arrebataban los hijos del primer matrimonio, y, en relación con la novela, el adulterio 'de cualquiera de los dos cónyuges' fue considerado causa de separación (pese a que seguía siendo delito).

El volumen se completa con una serie de textos de la autora, casi desconocidos, como la recensión que hizo del ensayo de Simone de Beauvoir 'El Segundo Sexo' en 1950, al poco de publicarse en Francia, cuando en España era de difícil circulación, y donde ponía en entredicho las tesis mantenidas por la Sección Femenina, las cuales consideraban a la mujer un ser inferior, únicamente válido para funciones domésticas y para las derivadas de la maternidad; o 'El domicilio conyugal', su controvertido artículo publicado en 1953 en 'ABC', y en el que denunciaba la escalofriante situación de las mujeres casadas víctimas de violencia, origen de la campaña, y otros textos relacionados con las desavenencias matrimoniales, que se complementan con las narraciones.

Por criterios puramente ideológicos, la voz de Mercedes Formica ha sido silenciada, debido a que sobre ella pesa haber pertenecido a la Falange de José Antonio Primo de Rivera, una militancia juvenil que duró hasta el fusilamiento de este, como afirma Soler, y no tuvo implicación política posterior y jamás se sintió cómoda en el régimen franquista.

Así, por su posterior evolución ideológica, por el valiente trabajorealizado para mejorar la condición jurídica de la mujer en un tiempo tan difícil como el franquismo y por su valía artística e intelectual, merece un digno rescate.De todo ello tratará la presentación del volumen, en la que intervendrán el autor y Maribel Rodríguez Fidalgo, profesora y vicedecana de la Facultad de Ciencias Socialesde la Usal.