La Ofrenda Floral a la Virgen María estrena procesión por el Claustro de la Catedral
La celebración contó con la asistencia de un amplísimo grupo llegado desde La Fuente de San Esteban
Bajo la organización de la Delegación de Misiones que dirige José María Rodríguez-Veleiro, la Catedral de San María de Ciudad Rodrigo acogió en la mañana del sábado la ya tradicional Ofrenda Floral a la Virgen María, en el marco del mes de mayo que la Iglesia Católica dedica a la figura de la Virgen.
La cita de este año, en la que debutaba el actual Administrador Apostólico de la Diócesis, Jesús García Burillo, tuvo como gran novedad la incorporación de una procesión, que transcurrió por el Claustro de la Catedral. Concretamente, se procesionó la Virgen de los Niños que se estrenó antes de Semana Santa en el Viacrucis callejero organizado por la Parroquia de El Salvador.
La Virgen, junto a todos los participantes en la Ofrenda, recorrió parte del Claustro antes de entrar en la nave principal de la Seo, donde fue llevada hasta el altar. Una vez en el lugar, comenzó el acto en sí con varias primeras lecturas antes del Evangelio, que fue pronunciado por el párroco de La Fuente de San Esteban, Anselmo Matilla.
Junto a él se acercaron hasta Ciudad Rodrigo un amplísimo grupo de niños de La Fuente (y el entorno), ayudando de este modo a 'subsanar' el bajo número ?para lo que podía ser- de niños mirobrigenses participantes en la Ofrenda (los únicos que tenían excusa eran los que estaban comulgando por primera vez a esa misma hora en la Parroquia de San Andrés).
Tras el Evangelio, Jesús García Burillo pronunció una breve homilía a la que siguieron las peticiones por parte de varios niños antes de llegar al momento culminante de la Ofrenda Floral, pasando todos los asistentes por la zona del altar, donde varias voluntarias de la Delegación de Misiones fueron recogiendo las flores y 'plantándolas' en unos maceteros de colores.
Cada uno de los maceteros representaba un continente, siendo plantada la flor de cada niño en el macetero del mismo color que el corazón que les habían entregado al inicio de la celebración. Tras la Ofrenda, se rezó el Padrenuestro, y ya a la hora de salir de la Seo, todos los presentes recibieron de manos del Administrador Apostólico otro corazón, en este caso en forma de broche para colocarse en la solapa.