Nos dejó José Pinto

Como un terrible y sorprendente mazazo, nos ha llegado la noticia de la muerte de José Pinto, precisamente dos días antes de que pronunciara el Pregón Mayor del Carnaval.

Una persona a la que todos admiramos y respetamos por su conocimiento y cultura y, sobre todo, por su simpatía y amor a nuestra tierra, como ha demostrado sobradamente y durante mucho tiempo en el programa "Boom", de Antena 3.

Concretamente, el Día del Libro, coincidí con él en nuestra arrabalera Calle del Rollo, donde se celebraba esa festividad leyendo "El Quijote". Él lo hizo después del alcalde y, a continuación, nos saludamos y tomamos una cerveza en una de las terrazas existentes allí. Fue una conversación tranquila y sincera y ya nos anunció a mi esposa y a mí que tenía previsto dejar el programa televisivo para dedicarse de lleno a sus labores ganaderas.

Era, pues, un enamorado de su campo, de su ganado y de su tierra, que es la nuestra. Fue un rato muy grato e inolvidable, y llegué a la conclusión que en directo su calidad humana superaba a la televisiva dada la sencillez y la cordialidad de su carácter.

José Pinto siempre será recordado como el ganadero de la televisión y su testimonio de superación y de esfuerzo será también un ejemplo para todos.

Su muerte, en suma, que nos ha sobrecogido, nos hace reflexionar una vez más sobre la liviandad de nuestra vida, pero también, aún fallecido, a José Pinto lo sentiremos próximo por aquello que dijo Biermann de "que cerca sentimos a algunos que están muertos; y que muertos nos parecen otros, que aún viven".

Descanse en paz, querido amigo y también paisano.

Miguel Cid Cebrián