La celebración contó con la presencia del antiguo Obispo Civitatense Julián López
La Catedral de Santa María de Ciudad Rodrigo acogió durante la mañana del sábado la Ordenación Sacerdotal del joven Efraín Peinado Hernández, el último de los jóvenes que tenía la Diócesis en camino al Sacerdocio. La celebración fue presidida por el Administrador Apostólico de la Diócesis, Jesús García Burillo, junto al Obispo emérito de Sigüenza-Guadalajara, el guinaldés José Sánchez, y al antiguo Obispo de Ciudad Rodrigo Julián López, que sigue como prelado de la Diócesis de León.
Efraín Peinado estuvo acompañado en la solemne ceremonia (que duró dos horas), por su familia, sus amigos de su localidad natal, Castillejo de Martín Viejo, los alumnos del Seminario Diocesano de San Cayetano, los compañeros del Teologado de Ávila (que funciona como Seminario Mayor del centro Civitatense), y por numerosos fieles, especialmente de las parroquias con las que ha venido colaborando: San Cristóbal, El Salvador, y en la actualidad, Santa Marina, el Arrabal de San Sebastián y Águeda.
Además, en el apartado de animación, la misa contó con la música de uno de los órganos de la Seo, así como con la colaboración del Coro de la Pastoral Juvenil, que estuvo repartido por las dependencias del propio Coro de la Catedral.
La primera parte de la celebración transcurrió con normalidad, siendo el primer punto diferente cuando, antes de la homilía de Jesús García Burillo, Efraín Peinado fue presentado como aspirante al Sacerdocio por parte del rector del Seminario Diocesano, Juan Carlos Sánchez.
En lo que respecta a la homilía, Jesús García Burillo explicó que conoció a Efraín Peinado hace 9 años en su calidad de Obispo de Ávila, cargo que empezó a desempeñar hace justo 16 años: "quién nos iba a decir que nos íbamos a encontrar aquí". Jesús García Burillo explicó que el -en esos momentos- todavía diácono le ha acompañado en estas semanas de aterrizaje en la Diócesis como Administrador Apostólico. Por último, pidió a Efraín Peinado que le diga a los 30 alumnos del Seminario Diocesano que "no tengan miedo en pescar hombres", es decir, en convertirse en sacerdotes.
Finalizada la homilía, llegó el rito de la Ordenación propiamente dicho, con las promesas de Efraín Peinado (en forma de 'cuestionario'), el rezo de las Letanías (durante el cual el aspirante se postró en el suelo a los pies del altar), la imposición de manos por parte tanto del Administrador Apostólico como el resto de sacerdotes, la plegaria de Ordenación, y la imposición de la estola y la casulla, de lo que se encargaron el rector del Seminario, Juan Carlos Sánchez, y el párroco de Castillejo de Martín Viejo, Fernando Fuentes.
El rito prosiguió con la unción de las manos, la entrega del pan y el vino (que fueron acercados al altar por los propios padres de Efraín Peinado), y el Beso de la Paz, consistente en que el nuevo sacerdote recibió el abrazo, ya dentro del Presbiterio de la Catedral, de todos los sacerdotes presentes.
La intervención final del nuevo sacerdote
Una vez ordenado, la celebración continuó con normalidad, hasta el momento final, en el cual tomó la palabra Efraín Peinado para realizar una intervención en la cual anunció que está "dispuesto a servir con alegría al pueblo que camina".
Efraín Peinado ?que se emocionó en varios momentos- dio las gracias al Administrador Apostólico hasta el pasado mes de enero, Francisco Gil, "por su cercanía y trabajo discreto"; al Obispo emérito de Ciudad Rodrigo, Raúl Berzosa, "quién en estos meses me ha hecho llegar su cariño, cercanía y oración"; y a Julián López, de quién recuerda que fue nombrado Obispo de León poco después de realizar una visita pastoral a Castillejo de Martín Viejo donde él ejerció como monaguillo.
Asimismo, mostró su agradecimiento a su familia, a los párrocos que ha tenido Castillejo de Martín Viejo durante estos años, al Seminario San Cayetano, a sus compañeros Miguel Ángel y Anselmo ("que hemos caminado juntos"), a los seminaristas menores ("no tengáis miedo si veis que este puede ser vuestro camino"), al Teologado de Ávila, a sus amigos del pueblo, a los profesores de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, a la gente de Castillejo de Martín Viejo, y a los fieles en general.
La celebración concluyó con la lectura de la Bendición emitida por el Papa Francisco. A continuación, Efraín Peinado recibió los saludos de todos los asistentes, buena parte de los cuales se trasladaron al Seminario Diocesano para disfrutar de un vino español. Efraín Peinado presidirá su primera misa este domingo 24 a las 18.00 horas en su localidad natal, Castillejo de Martín Viejo.