Cuando el partido ya estaba 'decidido' con el 3-0, el árbitro cometió un grave error que le hizo expulsar ¡dos veces! a un jugador visitante
Tras el disgusto con el cual la afición del Francisco Mateos se marchó de vacaciones de Navidad (al anotar el Salamanca UDS CF B el gol de la victoria en el tiempo de descuento tras haber marcado el Ciudad Rodrigo poco antes lo que suponía el empate), el primer partido tras las fiestas acabó con una sonrisa de oreja a oreja en los rostros de la parroquia mirobrigense, gracias a una victoria de los suyos sobre el Onzonilla sin tensión final.
Eso sí, el marcador final de 3-0 (2 goles de Carli ?en el 11' de cada período- y uno de Héctor) es 'engañoso'. A decir verdad, los tres goles anotados por el Ciudad Rodrigo fueron tres 'chispazos' en un tramo del partido donde la imagen de los locales no fue nada excelsa, viéndose superado incluso por su rival (por ejemplo, en posesión), pero teniendo un buen día en lo que a puntería se refiere. Para ver a un mejor Ciudad Rodrigo hubo que esperar al final, cuando el partido ya estaba con todos los goles en el marcador.
Lo que resultó más inexplicable fue que el Onzonilla se fuese sin marcar, teniendo en cuenta las ocasiones que fueron generando, pero acumularon fallos muy claros ante la portería mirobrigense además de ver como Pepo hacía dos enormes paradones en el tramo final, cuando además ya se habían quedado con 10 por un grave error arbitral (dentro de la crónica lo contamos). Quizás esos fallos expliquen su pésima racha: llevan 9 partidos sin conocer la victoria tras tener un arranque liguero bastante aceptable.
En lo que respecta al Ciudad Rodrigo, con este triunfo cortan una miniracha de 3 encuentros sin ganar. Continuando con las estadísticas -que ya saben que aquí gustan mucho- hay que resaltar que el Ciudad Rodrigo le ha dado la vuelta en el último mes a la que decía que llevaban más victorias fuera de casa que en el Francisco Mateos: ahora ya son 4 triunfos ante su parroquia y 3 en tierras foráneas.
LA CRÓNICA
Después del 'largo' parón navideño (aunque el Ciudad Rodrigo jugó un amistoso esta semana contra el Navega), el encuentro comenzó con una fase un poco dubitativa por parte de ambos equipos, en la que se vieron unas cuantas imprecisiones. En esta primera fase, ambos equipos se asomaron varias veces a las áreas rivales: el Ciudad Rodrigo tuvo tres opciones a balón parado (un par de córners y una falta cerca del área) mientras que el Onzonilla fabricó dos buenas llegadas. Todas estas opciones las desbarataron las respectivas defensas.
La primera ocasión clara, en el 11', fue el primer gol del partido: en torno al medio del campo, Dani Crespo pasó el balón a Manu González y éste a su vez a Carli, quién encaró el área elevando el balón a la salida del portero. Un defensa estuvo a punto de sacar el balón en línea de gol, pero sus esfuerzos fueron en vano.
Con el Ciudad Rodrigo por delante, fue el Onzonilla el que llevó la batuta la mayor parte de este período, con opciones periódicas de peligro: en el 14', una contra por la izquierda fue desbaratada por Medín ya en el área; en el 20', tuvieron una triple opción consecutiva, despejando las 2 primeras la defensa y acabando fuera la 3ª; mientras que en el 25', un balón desde la izquierda no lo llegaron a rematar por poco en el 2º palo por alto.
Los locales no volvieron a mirar arriba con peligro (salvo un balón que envió Manu González desde la izquierda que no alcanzó a rematar Edu Sánchez en el área) hasta el 33', en otra buena combinación: Carli ganó el balón por la derecha, llegó a línea de fondo entrando en el área, y lo envió atrás para el remate de Edu Sánchez, cuyo disparo se perdió al lado del palo derecho tras tocar a alguien por el camino.
De ahí hasta el final de la primera parte, el Onzonilla tuvo tres ocasiones de muchísimo peligro, pero no atinaron con ninguna. En el 35', el balón quedó franco al borde del área, enganchándolo fatal un jugador visitante; en el 38', el balón se paseó por el área local desde la izquierda, faltándole un suspiro a un jugador para empujarlo en el 2º palo; y en el 41', enviaron un balón desde la izquierda que Pepo repelió, pero quedó suelto, acabando por despejarlo un defensa.
La segunda parte comenzó más o menos por los mismos derroteros (quizá con el Ciudad Rodrigo con las ideas un poco más claras), probándolo por primera vez los locales en el 49' con un fuerte disparo de Lúa desde 3/4 de campo que se fue al lado el palo izquierdo. Al igual que en el primer tiempo, la primera ocasión verdaderamente clara de este período acabó en gol: Manu González envió el balón desde la derecha del área, casi en línea de fondo, rematándolo Carli en el 2º palo. Este gol llegó como en la primera parte en el 11', haciendo de este modo Carli un doble homenaje a su dorsal durante el partido.
Casi no se había asimilado este gol cuando cayó el 3º, obra de Héctor, que batió al guardameta rival de cerca tras ganarle la batalla a la defensa del Onzonilla. Nada más marcar ese gol, ya se le vio mejor cara al Ciudad Rodrigo (al mismo tiempo que empezaba el carrusel de cambios), probándolo Medín sin éxito poco después. Mientras, por parte visitante, su primera opción de este período llegó en el 60', cuando Risueño evitó un remate de cabeza en el área.
Con 3-0 en el marcador, el partido parecía que estaba sentenciado, y por ende podía volverse anodino. Pero el árbitro le puso picante en el 65'. El caso es que un jugador del Onzonilla hizo una falta que llevó asociada una amarilla. Para sorpresa de todos, el árbitro le sacó la roja, como si le hubiera sacado otra previamente. El Onzonilla empezó a quejarse con razón, acabando por ir el colegiado a cotejar sus notas con uno de los liniers, con el cual descubrió que había apuntado mal el dorsal de la única amarilla de la primera parte. Por lo tanto, no había ningún jugador expulsado.
Sin embargo, supongo por algo que le diría en esos momentos, el colegiado le acabó por volver a sacar la roja al mismo jugador. Algún jugador más del Onzonilla vio amarilla por protestar el error arbitral, y como 'colofón', su técnico fue expulsado tras haber intentado advertir al colegiado de su error. En total, esta chapuza arbitral -en un partido que estaba siendo muy tranquilo en ese aspecto- hizo que el partido estuviese parado 5 minutos de reloj.
A la vuelta del mismo, el partido entró en una fase muy abierta, de continuo toma y daca, en el que pudieron caer varios goles de los dos equipos. Los del Onzonilla los evitaron principalmente jugadores mirobrigenses: Javi Moríñigo despejó en el 77' un nuevo balón llegado al área pequeña desde la izquierda; Pepo hizo un paradón a una mano también en el 77' a un remate de cabeza; y Pepo solventó en el 82' con otro paradón un disparo a bocajarro.
En lo que respecta al Ciudad Rodrigo, su altísima efectividad en los 60 minutos en los que se consiguieron los goles se evaporó en el tramo final. En el 82', Dani de Frutos enganchó mal el buen balón que le había enviado Medín desde la derecha; en el 85', Gabri no pudo elevar el balón lo suficiente ante el portero, atrapándolo éste; acto seguido, Maza envió un centro-chut que no entró y que no llegó a rematar a tiempo Javi Moríñigo; y en el 92', Javi Moríñigo le pasó el balón atrás a Gabri, quién desde la fuera del área lo mandó fuera rozando el palo izquierdo.
//ZONA MIXTA
El técnico mirobrigense Javi Martínez señaló que en la primera parte el partido se les puso de cara "en una contra muy bien llevada por los jugadores". Posteriormente, le dieron el balón al rival: "les intentamos esperar para buscar una acción similar", resultando que el partido llegó al descanso "sin tampoco tener mucha posesión de balón, hay que ser sinceros".
De cara a la segunda, "cambiamos un par de cosas en el planteamiento, y como se ha podido ver, ha podido funcionar". De este modo, "en dos acciones puntuales, nos pusimos 3-0".
Como único "pero", Javi Martínez resaltó que, tras quedarse el Onzonilla con 10, "teníamos que haber sabido leer ese momento, no para marcar más, sino para calmar el partido, darle pausa; y hemos querido irnos más arriba, creando espacios a la espalda de nuestra defensa, dándole alguna opción".
En resumidas cuentas, el técnico se mostró "contento por haber tenido, entre comillas, un partido tranquilo, que al final tampoco lo ha sido", logrando "los tres puntos, que al final es lo más importante".