La Comunidad finaliza con 1.881 menos que en 2017 y sólo en el último mes ha perdido 541 profesionales por cuenta propia
Castilla y León es la comunidad autónoma que más afiliados al RETA pierde de las cuatro comunidades que pierden autónomos en España. Es decir, Castilla y León ha cerrado 2018 con 1.881 autónomos menos que en 2017, un descenso del 1% y que supone 5 autónomos al día menos, informa ATA. Sólo en el último mes la región ha perdido 541 autónomos. Al contrario, en el conjunto del territorio español, los autónomos han crecido cinco veces más que en 2017 y casi el doble que en 2016. En concreto, el incremento anual de autónomos se ha fijado en 49.986 personas más, es decir, un 1,6% más de autónomos en España en el último año.
Por provincias, es Zamora la que más autónomos pierde porcentualmente con un 2,4% menos en un año (-428). Le sigue en mayor pérdida Palencia con un descenso del 1,9% , con -258; León (-1,1%, con -416) y Soria (-1%, con 80). Salamanca pierde un -0,4% con 115 autónomos menos.
"El envejecimiento y la falta de población han dejado de ser una preocupación social para ser un lastre económico" ha asegurado Soraya Mayo, presidenta de ATA CyL. "Las medidas aisladas para fomentar el emprendimiento no funcionan porque tenemos un problema estructural mucho más grave. Necesitamos atraer y retener gente en Castilla y León. No es casualidad que en Galicia, Asturias y Aragón, también pierdan autónomos; son regiones en las que el envejecimiento y la pérdida de habitantes está afectando a su economía, al igual que en Castilla y León".
Comercio, hostelería y construcción pierden autónomos
Por género destaca, como en el conjunto de España, el emprendimiento femenino. Son ellas las únicas que frenan algo la caída libre de los datos de autónomos en Castilla y León. En el último año las autónomas castellano y leonesas han crecido en 266 mujeres, un incremento del 0,4%, frente al descenso del 1,6% de los varones autónomos. Por sectores, en el último año en Castilla y León destaca el incremento de los autónomos en sectores como la educación y las actividades inmobiliarias (+6,4%) en contraste con la pérdida de trabajadores por cuenta propia en sectores mucho más tradicionales en la región como el comercio (-2,6%), la hostelería (-2,2%), construcción (-1,9%) o industria (-1,8%).