Larguísima Nochevieja con múltiples puntos con animación añadida y sin incidentes graves
Pasadas las 12.00 horas de la mañana todavía se podía ver por las calles a jóvenes con el traje puesto que no habían pasado por casa
La bienvenida al año 2019 fue de lo más larga en Ciudad Rodrigo, pese a que la noche fue muy fría ?bastante más que el año pasado- desde el primer momento: a medianoche, ya se podía ver una capa blanca brillante en vehículos aparcados en puntos donde no llegaba bien la luz. Evidentemente, la temperatura fue bajando durante la madrugada, siendo por ejemplo de 3 grados bajo cero a eso de las 5.00 horas en la Avenida Conde de Foxá, como se puede ver en una de las imágenes.
Este año, la Nochevieja en Ciudad Rodrigo tuvo múltiples puntos con atractivos añadidos. Uno de los más destacados fue el Hotel Conde Rodrigo II, que recuperó parte de su leyenda de epicentro de las Nocheviejas organizando una gran cena de fin de año a la que siguió una sesión de discoteca en las propias dependencias del Hotel que se extendió, tal y como estaba previsto, hasta la mitad de la madrugada (lo que permitió a sus trabajadores disfrutar también de parte de la noche festiva).
En materia de cotillones puros y duros, este año fue destacado el organizado por el Yoanna Irish Pub, donde se vivió una larga velada animada por un DJ, que tuvo como alicientes ?además de la habitual barra libre- canapés durante la madrugada, servicio de seguridad privada, y servicio de guardarropa.
También tuvo cotillón durante la madrugada El Paraje (que instaló incluso una carpa exterior), mientras que en el Casino Mirobrigense se disfrutó de una fiesta con orquesta incluida que estuvo de lo más animada. La mayoría de los asistentes a estos cotillones acabaron rematando la fiesta en algún que otro bar de la zona de la Colada.
Continuando con este repaso por las zonas donde hubo animación extra respecto a lo habitual, tanto el Bar San Blas como el Jois contaron con DJ. En éste último establecimiento, ejerció como tal Sergio Olvidado, que le dio a la noche un entretenimiento adicional más allá de la propia música. Hay que apuntar que al igual que el año pasado La Glorieta, descansó en Nochevieja (reabrió a media mañana, para 'recibir' a jóvenes que todavía estaban de camino a casa).
Como es habitual, según la noche fue avanzando, la atención se fue trasladando al centro histórico, a diversos puntos de la calle Toro, la Plazuela del Buen Alcalde y la calle Colada (y sus inmediaciones), donde 'acabó' la Nochevieja: cerca de las 12.00 horas de la mañana del Día de Año Nuevo en el Pub Excalibur todavía había jóvenes apurando la fiesta.
Muchos de estos jóvenes que vieron amanecer y mucho más allá, tuvieron tiempo para desayunar antes de regresar a sus casas. Asimismo, todos aquellos (no sólo jóvenes) que se recogieron a partir de las 7.00 horas aproximadamente, tuvieron la oportunidad de comprar churros para sus familias en la churrería del Centro Comercial (y de tomarse ellos mismos un chocolate con churros).
Según la información facilitada por el servicio de prensa del 112, durante la madrugada no se registró ningún incidente de gravedad ni en Ciudad Rodrigo ni en la comarca. Hay que apuntar por último que, como en años anteriores, hay vecinos de la comarca que se desplazaron a disfrutar de la Nochevieja a la Abadía de los Templarios, en La Alberca.