Además, el pasado sábado se entregó un lote de alimentos a numerosas familias para que también puedan disfrutar de unos días especiales en Navidad
El Comedor de los Pobres de Salamanca ha ofrecido, un año más, la tradicional cena de Nochebuena para las personas que una fecha tan especial se encuentran solas o no tienen un hogar. El obispo, Carlos López, ha vuelto a acompañar a los comensales que han podido degustar un menú navideño a base de embutidos ibéricos, langostinos, aguacates con gambas, crema de marisco, lenguado o solomillo, tartas, café y dulces navideños.
El Comedor de los Pobres, que gestionan los Misioneros Amigos del Silencio, está tutelado por un nutrido grupo de voluntarios que prepara comida y reparte alimentos entre los más necesitados durante todo el año. Además, el pasado sábado entregó un lote de alimentos a numerosas familias para que también puedan disfrutar de unos días especiales en Navidad.
Fotografías: Alberto