Los Pacheco también se adjudican la Justa Medieval

Los antiguos jardines de Bolonia de Ciudad Rodrigo hicieron un nuevo viaje en el tiempo en la tarde del domingo para ser escenario de otra actividad fija en la programación de la Feria Medieval: la Justa entre las familias de los Garcilópez de Chaves y los Pacheco, que se desarrolló en la misma zona en la que tuvo lugar el espectáculo teatral La Conjura de Ciudad Rodrigo en la noche sabatina.

Cada una de las familias tuvo un representante a caballo en la Justa, dirigida por Las Águilas de Valporquero. Por parte de los Garcilópez de Chaves, compareció Bernardo del Carpio ?con distintivos rojos-, y por parte de los Pacheco, Esteban de Pacheco ?con indumentaria negra-, siendo ambos jaleados tanto por los numerosos espectadores congregados en Bolonia como por los miembros de Rodericus divididos en familias.

Bernardo del Carpio y Esteban de Pacheco se midieron sobre sus monturas en 4 juegos: uno de habilidad con espada, cortando calabacines desde encima del caballo; otro de lanzamiento a diana; un tercero consistente en coger con sus lanzas una serie de sortijas de colores colocadas a cierta altura; y un último juego de golpeo del estafermo. En los tres primeros juegos se impuso Esteban de Pacheco, y en el último, Bernardo del Carpio.

Intercalados entre esos 4 juegos se desarrollaron tres combates a pie con espadas entre los hombres de armas de ambos caballeros (pertenecientes a los Caballeros de la Hoste do Magriço, de Portugal). El primer combate a pie lo ganó la familia de los Garcilópez, y los otros dos, la familia de los Pacheco. Todo ello hizo que la victoria en la Justa se la adjudicase Esteban de Pacheco, celebrándolo por todo lo alto sus seguidores.

Como remate final, ambos caballeros se bajaron de sus monturas para medirse a pie, resultando también triunfador Esteban de Pacheco, cuya familia une esta victoria a la lograda en la mañana del sábado en el Torneo Rey Juan de tiro con arco. Una vez finalizado el espectáculo en sí de la tarde dominical, todos los participantes en el mismo fueron largamente ovacionados por todo el público congregado en Bolonia.