La nueva norma de medición de emisiones incrementará el precio de los coches diésel

El nuevo método de homologación de emisiones, que entra en vigor el 1 de septiembre, afectará claramente al precio de venta de los automóviles, especialmente en el caso de los diesel. Y es que, con esa referencia habrá cifras mayores de consumo y emisiones en prácticamente todos los vehículos, que subirán de tramo en el impuesto de matriculación, con lo que serán más caros para el comprador.

Por eso, las marcas han lanzado atractivas ofertas en este mes, con el fin de poder vender los coches que tienen almacenados, ya que a partir del 1 de septiembre será más difícil colocarlos en el mercado, debido al incremento del precio.

"Es un buen momento para comprar un coche. Hay modelos que llegan a tener ofertas de hasta el 40%. Las empresas quieren deshacerse del stock ahora, antes de que llegue la nueva regulación", explicaba Gerardo Pérez, presidente de Faconauto, en el diario Cinco Días.

Además, las complicaciones para el diésel serán mayores, si se concretan los anuncios políticos de la aplicación de impuestos especiales. En julio, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó que el Gobierno estudia un nuevo tributo ecológico que se aplicará al gasóleo de automoción. Y la semana pasada, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, confirmó que ya están trabajando en el borrador del impuesto para contribuir a la "reducción de emisiones".

Los fabricantes ya están tomando medidas para incrementar los motores híbridos, aunque algunos expertos aseguran que es falso que los diesel contaminen más que los gasolina, ya que "esta afirmación solo es verdad en los coches de gasóleo más veteranos. En realidad los coches diésel fabricados actualmente emiten un 30% menos de CO2 y un 85% menos de dióxido de nitrógeno que los turismos de hace 10 años", publicaba el ABC.