Carlos Cabanas, secretario general del Ministerio de Agricultura, resalta la necesidad de mantener un elevado estatus sanitario para favorecer las exportaciones
El vacuno aporta el 17,5% de la producción final ganadera, genera cerca de 3.300 millones de euros, crea empleo en las zonas rurales y conserva el entorno. Así lo ha destacado el secretario general del Ministerio de Agricultura y Alimentación, Carlos Cabanas.
Cabanas ha dicho que se mantienen los buenos niveles de precio de mercado, lo que lleva asociada una buena marcha de las exportaciones, tanto de carne como de animales vivos, y permite que el sector pueda asumir nuevos retos, como la reducción de emisiones y contaminantes, o como la resistencia a antimicrobianos. A este respecto, ha resaltado la importancia de la norma sobre transmisión electrónica de datos en las prescripciones veterinarias de antibióticos, recientemente aprobada. Una norma, ha señalado, que goza de alto grado de consenso, con la que se controla su suministro y se reduce el riesgo de diseminación de la resistencia a los antibióticos.
En esta línea ha hecho hincapié en la necesidad de mantener un elevado estatus sanitario, no solo para la mejora de la rentabilidad de las explotaciones, sino también para favorecer significativamente las oportunidades comerciales y la competitividad de las producciones. Así, en materia de comercio, Cabanas ha ponderado el incremento de la internacionalización del sector agroalimentario en España en los últimos años, de un valor de 33.000 millones de euros generados en 2011, se ha pasado a superar los 50.000 millones de euros el pasado año.
Por su repercusión en el sector, el secretario general ha abordado también el nuevo proceso de reforma de la Política Agraria Común, explicando que se están manteniendo reuniones de trabajo con diferentes países de la UE y estrechando lazos con Francia, Portugal e Italia para aunar posturas en el marco de las negociaciones sobre el presupuesto comunitario y la propia PAC. Todo ello con el objetivo de defender un presupuesto adecuado y una configuración lo más beneficiosa posible para España, que ayude, como hasta ahora, al crecimiento del sector agroalimentario español.