Exige a las administraciones "un cambio radical" y afirma que no se puede acabar con los animales "porque a la fauna salvaje no se le hacen pruebas"
"Esta situación hay que atajarla, sin enfrentamientos". Así se ha manifestado el presidente de Asaja nacional, Pedro Barato, durante su asistencia a la 27 asamblea de Asaja Salamanca, refiriéndose a la necesidad de cambiar la legislación y las medidas en torno a la tuberculosis, un problema que sigue preocupando a los ganaderos. "Hay que dar un cambio radical". Barato aseguró que, si la vaca o la oveja tienen un problema sanitario, "habrá que atajarlo, pero no se puede acabar con las vacas porque a determinados animales salvajes no se le hacen pruebas".
Para Barato, es necesario cambiar el sistema, "aplicar el sistema humano al animal", analizando y determinando las causas de la enfermedad porque ahora, aseguró, "hay muchos falsos positivos" que acaban en el sacrificio de una vaca que vale 1.50o-2.500 euros, por la que el ganadero recibe 500. Para el presidente de Asaja, "no vale matar miles y miles de vacas". Para Barato, si esas vacas están enfermas "deberían quemarse, pero pasa a la cadena alimentaria, aunque lo haga con todas las garantías".
Sobre las restricciones del agua, Barato ha pedido a las administraciones un ordenamiento y una programación para conocer si el agricultor dispondrá de agua para sus cultivos en el futuro o no.