Medio millar de personas disfruta por fin del sol en la Marcha Asprodes tres años después

La jornada del sábado amaneció muy nublada en Ciudad Rodrigo, e incluso cayó un pequeño chaparrón a primera hora, pero a media mañana las nubes abandonaron el cielo y empezó a lucir un radiante sol que hizo que por fin este año se pudiera desarrollar con total normalidad la clásica Marcha Asprodes, después de dos años con problemas.

El año pasado, las malas previsiones meteorológicas aconsejaron su suspensión varios días antes de la fecha prevista, mientras que en 2015, la lluvia fue la protagonista del recorrido, que se modificó respecto a lo inicialmente previsto, para que fuese más corto. Esto hacía que únicamente en el año en que se cambió la Marcha a la tarde de los sábados, en 2014, se hubiera podido realizar sin incidencias (aquel año hizo una excelente meteorología con altas temperaturas).

La edición de este año, la 30ª de la historia (aunque no todas se han podido celebrar), traía varias novedades, una de ellas, que era necesario haberse inscrito previamente, para así estar amparados por el seguro de accidentes de la prueba. Parece que esta obligatoriedad de inscripción ?aunque era gratuita- restó algo de participación a la Marcha, congregándose finalmente medio millar de personas, que disfrutaron de una aceptable temperatura.

Como es habitual, la Marcha se pudo hacer de dos formas diferentes: a pie y en bici. Ésta última modalidad sigue yendo a más edición tras edición, congregándose en la tarde sabatina un amplio grupo de ciclistas de todas las edades, entre ellos bastantes niños y jóvenes. Ellos fueron los primeros en ponerse en marcha en la Plaza Mayor mirobrigense, una vez el concejal de Servicios Sociales, Carlos Fernández Chanca, cortó la cinta inaugural de la Marcha, acompañado de otros cuatro concejales (Marcos Iglesias, José Manuel Jerez, Jesús Sánchez Agudo y Carolina Paniagua) y del gerente de Asprodes, Juan Recio.

Unos minutos después de que los ciclistas hubiesen tomado la calle San Juan, se colocaron en el inicio de la misma las personas que optaron por hacer la Marcha a pie, para proceder a darles la salida a ellos también. Tanto ciclistas como andarines afrontaron un recorrido nuevo, que ya se preparó para la edición del año pasado, pero que quedó pendiente de estreno debido a la mencionada suspensión.

Este nuevo recorrido, que consta de 12,3 kilómetros, transcurrió por la Puerta de Santiago, Cuesta de Santiago, Avenida de La Concha, calle Fuenteguinaldo, Avenida Conde de Foxá, carretera de Sanjuanejo hasta el cruce con la Cañada Real, Ermita de la Peña de Francia, Finca Casasola, Camino de Pedrotoro, de nuevo Ermita de la Peña de Francia, calleja de Valhondo, Avenida Conde de Foxá, zona del Árbol Gordo, Avenida de Sefarad, Avenida de Portugal, calle Francisco Soto Marné y calle Góngora.

Cada persona realizó la Marcha a su ritmo (aunque siempre por detrás de los vehículos que abrieron cada uno de los bloques), tardando los andarines una media de dos horas en completar el recorrido. Todos los participantes tuvieron como meta el Parque del Valle de San Martín, escogido un año más para realizar una gran fiesta a modo de conclusión del evento.

Según iban llegando, pudieron disfrutar de huevos fritos con farinato gracias a la Asociación Gastronómica de Amigos del Farinato, comenzando a continuación una actuación musical del grupo Va por ti. Al ir anocheciendo, las temperaturas cayeron de forma notable, por lo que la mayoría de los congregados se marcharon pronto, al carecer de ropa de abrigo ya que todavía tenían la ropa con la que habían hecho la Marcha.