Los vecinos escenifican la estancia en la localidad de la infanta María Manuela de Portugal, en 1543, para preparar su boda con el príncipe Felipe II
Los vecinos de Aldeatejada han vuelto a protagonizar este domingo la recreación de la estancia en la localidad de la infanta María Manuela de Portugal, en 1543, para preparar su boda con el príncipe Felipe II, un acontecimiento que denominan Vísperas Nupciales y en el que se implica todo el pueblo para vivir una auténtica fiesta renacentista iniciada ayer con un desfile por Salamanca.
Las calles del municipio y los balcones se han engalanado con estandartes para aportar mayor vistosidad a los actos de esta sexta edición de las Vísperas Nupciales que sigue un estricto protocolo y que se iniciaron la salida de la comitiva de caballistas que acompañaba a María Manuela de Portugal en su carroza hasta el casco urbano de Aldeatejada para encontrarse con el príncipe Felipe y sus nobles. La copla de ciego anunciaba el encuentro entre los novios preparados ya para asistir a la tradicional recepción, a la que han seguido el torneo de caballeros y el desfile del cortejo real.
También daba comienzo el mercado renacentista, con puestos de artesanía y productos típicos y que cada año se convierte en otro de los atractivos de la jornada.
Los romances, las danzas y la confesión de Felipe II a María Manuela daban paso a la misa en la iglesia parroquial. La jornada se completa con una comida renacentista en honor a los novios para todos los participantes en las Vísperas Nupciales y por la tarde continuarán las actividades con danzas renacentistas, juegos y teatro. Además, por segundo año, la programación ha incluido el Concurso Fotográfico Fiesta Renacentista de Aldeatejada.
Fotografías: Alberto Martín