El PSOE califica de “chapuza’ la reforma de la zona recreativa de La Aldehuela
Consideran "un despilfarro por el resultado obtenido en relación a la inversión"
El Proyecto de remodelación de la zona verde o parque de La Aldehuela, incluido el recinto de la Ciudad Deportiva, acometido por el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Salamanca "ha resultado un nuevo fiasco y una nueva chapuza de gestión del alcalde Alfonso Fernández Mañueco, tanto en su concepción y definición como en su conclusión final", señalan desde el PSOE. "Además de un despilfarro por la efectividad y el resultado obtenido en relación al presupuesto empleado, más de un millón de euros, que dista mucho de poder satisfacer las pretensiones y necesidades ciudadanas, y de cumplir con las posibilidades y aspiraciones habidas", añaden.
En primer lugar porque con el diseño del nuevo vial contemplado en este proyecto, "estrecho y de un solo sentido, se imposibilita que se pueda compaginar o hacer compatible el acceso y estacionamiento de los vehículos de los usuarios con los de los servicios públicos de limpieza y de recogida de basuras o de carga y descarga, que ha provocado ya la acumulación de desperdicios durante varios días sin que pudieran ser recogidos, y las primeras quejas de los empresarios propietarios de negocios hosteleros de la zona, pero lo que es peor, imposibilita también la entrada de servicios de emergencias, haciendo muy difícil por no decir imposible el tránsito por ejemplo de camiones de bomberos o ambulancias de grandes dimensiones cuando tengan que acudir a atender un suceso o un incidente que requiera su asistencia, convirtiendo esta zona verde y de ocio, que debería contar con todas las garantías para el disfrute y el esparcimiento de forma segura, en una auténtica ratonera".
Una situación, provocada por "la falta de previsión, planificación y diligencia a la hora de proyectar y ejecutar este proyecto" que, en un principio, si contemplaba un doble sentido tal y como afirmaba el propio alcalde en su presentación sin que se haya llevado al efecto, y que ha obligado a los responsables municipales del Consistorio salmantino a poner en marcha "una solución improvisada que no estaba prevista en un principio, impidiendo y limitando el estacionamiento o el aparcamiento, tal y como muestran las fotografías de los vehículos de los usuarios a determinadas horas".
El Proyecto de remodelación de La Aldehuela tampoco ha incluido "la incorporación de mobiliario urbano adaptado o mimetizado con el entorno en la zona de merenderos como papeleras o contenedores de reciclaje que brilla por su ausencia". "Ni el mantenimiento, reparación y limpieza de las decenas de bancos que se colocaron hasta la masificación en una acción previa a la ejecución de este proyecto, y que presentan a día de hoy, en su totalidad, un aspecto lamentable por su estado, rotos y desvencijados, o con una gran acumulación de suciedad y excrementos de aves tal y como se demuestra en las fotografías que se adjuntan, que los convierten en inservibles e inutilizables".
A esto hay que añadir también "la negativa por parte del equipo de gobierno municipal encabezado por Mañueco para aceptar las propuestas realizadas por el Grupo Municipal Socialista encaminadas a mejorar el proyecto, y que tenían una gran demanda y aceptación ciudadana como son la instalación de unos aseos públicos y gratuitos y una base del servicio municipal de alquiler de bicicletas".
De igual manera, la inexistencia de una base municipal de entrega y recogida de bicicletas en préstamo, SALenBICI, "impide que se pueda combinar el uso de este servicio tanto para el disfrute deportivo y de ocio, como para el de la mejora de la movilidad de personas en el ámbito del transporte público de personas de forma alternativa, económica, ecológica y sostenible".
A todas las circunstancias "se suma el hecho del contrato de explotación de la ciudad deportiva adjudicado a una empresa privada. Contrato que otorga a esta empresa privada la posibilidad y la competencia, avalada por un informe técnico-jurídico del propio Ayuntamiento, para limitar la introducción a este recinto de bebida y comida, e impedir el acceso de personas en días tan tradicionales y señalados, tal y como siempre se había hecho, como el Lunes de Aguas. Condiciones inaceptables que usurpan un recinto municipal y por tanto público, propiedad de los salmantinos, para entregarlo al beneficio único y exclusivo de los intereses privados".