LA ALBERCA | El conocido párroco salmantino Poly Díaz apadrina esta costumbre albercana en nombre del proyecto solidario 'Luz para Benín'
Como cada año por San Antonio, La Alberca ha cumplido con la tradicional bendición del marrano de San Antón, que vivirá hasta su subasta el próximo año en las calles de la localidad serrana. En esta ocasión, la recaudación del sorteo del animal será para el proyecto solidario 'Luz para Benín' que está apadrinado por Poly Díaz, antiguo párroco de la localidad de origen guijuelense y que desde hace años dedica gran parte de su tiempo a tareas solidarias.
'Luz para Benín' es un proyecto cuyo objetivo es la creación de una escuela de formación profesional de electricidad en Banikoara, ciudad situada al norte de Benín. Una iniciativa nacida en el seno de la Unidad Pastoral "Centro Histórico de Salamanca", formada por las parroquias de La Purísima, San Martín-San Julián y San Sebastián y está puesta en marcha a cargo de La fundación "Vida para Todos", que es una ONG de acreditado prestigio implantada en Benín desde hace más de 10 años y dedicada a la educación de niños y jóvenes en varios enclaves en la zona más pobre, al norte del país. Más información y la posibilidad de donar en su página web 'Luz para Benín'
"Hemos venido a celebra esta fiesta, a mantener el contacto con este pueblo tan solidario y lleno de amor y cariño. Esta tradición es realmente una subasta popular que se hacía para atender a los más necesitados y en los últimos años se destina a tareas concretas. Este año nos lo propusieron y estamos encantados de participar", destacó el padrino Poly Díaz durante el evento. Estuvo acompañado de Curro Hernández, uno de los encargados del proyecto, que señala que es un proyecto de futuro: "Queremos dar esperanza con este proyecto en el que en unos tres años formaremos a jóvenes a los que animaremos a formar una empresa para que encuentren un futuro en su propio país, del que se podrá beneficiar toda su familia".
El alcalde de la localidad Miguel Ángel Luengo destacó la importancia de esta tradición: "Es una de nuestras costumbres más arraigadas y que identifica al albercano como solidario y su predisposición a ayudar a los demás, y también como vecinos que mantienen las tradiciones, renovándolas pero sin desvirtuar. Y aunque la tradición tiene un carácter solidario, no podemos olvidar que es un elemento promocional y muy diferenciador para nosotros, que hace que seamos protagonistas en días como hoy, algo que es de agradecer".
Numeroso público participó en la procesión con la imagen de San Antonio y en la posterior misa en la parroquia, justo antes de la bendición, que atrajo a más de un centenar de personas en la plaza del Solano. Al igual que en años anteriores, el marrano será cuidado por los vecinos, pero con especial atención del personal del ayuntamiento, engordando para ser sorteado entre todos aquellos que adquieran una papeleta. El acto tendrá lugar a finales de enero de 2018.