Se trata de una piedra policromada, 'Caín y Abel (La muerte de Abel)', del siglo XVI y la pintura 'San Ignacio de Loyola', firmada por Sebastiano Conca en el XVIII
La Diócesis de Salamanca cederá dos obras de arte a la exposición 'Reconciliare', es decir, a la próxima edición de Las Edades del Hombre, que se inaugurará en Cuellar (Segovia) el 24 de abril y que se prolongará hasta el 12 de noviembre
Se trata de una piedra policromada, ubicada en la Capilla Dorada de la Catedral, titulada 'Caín y Abel (La muerte de Abel)', cuyo autor es desconocido, aunque está fechada entre 1524 y 1526. "Una escultura muy realista que representa la violencia y el pecado en los orígenes de la humanidad", según explicaba Ramón Martín Gallego, delegado diocesano de Patrimonio de la Diócesis de Salamanca.
La otra obra, 'San Ignacio de Loyola', es un óleo sobre lienzo, de metro y medio de altura, firmado por Sebastiano Conca en el siglo XVIII, que se encuentra en el claustro superior de la Universidad Pontificia de Salamanca. Un ejemplo del Barroco como "arte para los sentidos", en opinión de Martín Gallego.
Sedes de la exposición
Como sedes para la XXII edición de la exposición de Las Edades del Hombre, la Fundación ha escogido tres templos emblemáticos de Cuéllar, tanto en lo religioso como en lo histórico y artístico.
Un proyecto que protege el arte
Desde su nacimiento, la Fundación Las Edades del Hombre ha velado por investigar, conservar y difundir el arte sacro de Castilla y León. En el año 1988 se llevaba a cabo en la Catedral de Valladolid la primera de las exposiciones de patrimonio religioso celebrada y hoy en día se contabilizan ya 21 ediciones que se han repartido por las nueve provincias de la comunidad, Madrid e incluso han tomado un carácter internacional con las promovidas en Amberes, en 1995, y en Nueva York, en el año 2002.
Desde esa primera muestra, denominada 'El arte en la Iglesia de Castilla y León', hasta la última, 'AQVA', clausurada en 2016, 11,2 millones de visitantes han respaldado el trabajo llevado a cabo con una media de 2.808 personas al día.
La sede de Las Edades del Hombre se localiza en el monasterio de Santa María de Valbuena, en la vallisoletana localidad de San Bernardo. Se trata de una construcción fundada en el siglo XII y considerada por historiadores del arte y expertos en arquitectura como el monasterio cisterciense mejor conservado de toda Europa.
Allí se localizan también los talleres de restauración de la Fundación, una de las grandes señas -junto con las exposiciones- del trabajo de rehabilitación: de las 4.519 piezas mostradas, aproximadamente un 40 por ciento han sido restauradas por los profesionales de Las Edades del Hombre recuperando no solo el valor estético, si no realzando una importante parte devocional de los pueblos y ciudades.
Casi tres décadas después, podemos decir que Las Edades del Hombre es más que un movimiento expositivo; sus raíces son las raíces de Castilla y León y su trabajo vincula la devoción, el arte y el carácter de la tierra. Es la identidad de un pueblo.