El leonés no confirma que exista un pacto entre él y el salmantino para que el perdedor ocupe la secretaría autonómica
El pistoletazo de salida para la carrera cuya meta está en la presidencia del PP de Castilla y León ya se ha producido. Realmente se produjo cuando Juan Vicente Herrera anunció el jueves 9 que no repetiría en el cargo, pero este viernes tanto Antonio Silván como Alfonso Fernández Mañueco presentaron los 150 avales que necesitaban para ser proclamados candidatos. La cifra no es casual, es la que pactaron ambos. El primero en acercarse hasta la sede del PP regional fue el alcalde de León. Silván no confirmó si existe un pacto entre él y Mañueco para que el perdedor de la contienda ocupe la Secretaría Autonómica, pero sí ha asegurado que su mano está «tendida al entendimiento» y ha animado a los afiliados 'populares' a participar en un proceso «sin tensión» para lograr un PP «más abierto». «Ha insistido en que «cree en Castilla y León y en sus nueve provincias», al tiempo que ha ensalzado su conocimiento del territorio basado, entre otras cosas, en las responsabilidades ocupadas en la Junta de Castilla y León antes de convertirse en alcalde de León. Finalmente, quitó importancia a que tanto Fernández Mañueco como él sumarían, en el caso de ser elegidos, un nuevo cargo a sus responsabilidades en los consistorios de Salamanca y León respectivamente, puesto que son «puestos de responsabilidad de ámbitos distintos» y no supone, en su opinión, una acumulación de cargo que, por otro lado, ha abogado por evitar. «También podría ser presidente de mi comunidad de vecinos y sería un cargo más», ha ironizado. Mucha confianza en su triunfo ha mostrado también Mañueco. El alcalde salmantino no ha dudado en afirmar que «sé que voy a ganar, por eso me presento. Estoy convencido de que el viernes seré el presidente regional del PP».