Niños y mayores de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Via Crucis arriman el hombro en los ensayos de los dos pasos de la hermandad del barrio de San Bernardo
Primer fin de semana de Cuaresma y, de nuevo, las aceras de los alrededores de los Trinitarios se llenan de trabajo y buen hacer. Tanto los niños que portarán la cruz, como los mayores que portarán al hombre de la injusta sentencia, hacen frente sin ningún tipo de reparo a las inclemencias del tiempo para que el próximo Jueves Santo el caminar sea motivo de orgullo de hermanos y espectadores.
Fotos: Álex López