A ropa, que hay poca  

Era un estúpido juego de la niñez consistente en hacer una montonera humana, todos encima del primero que pusiera las costillas en el suelo. Lo más divertido era comprobar que dentro del tumulto había algo o alguien pero no se sabía qué o quién era. Me viene esto a la cabeza cuando pasa el encierro a caballo tan, tan, tan arropado que nadie sabe cuántos animales van envueltos por los jinetes. Al final se corre la voz de que son cuatro y que sólo dos se han quedado en el campo. Vamos mejorando.

Como arropados se habrán sentido los tres primeros clasificados del Bolsín Taurino que les correspondía torear esta tarde. En la Alberca y en Diosleguarde deben haber echado el candado hasta los dueños de las Tabernas porque se han venido casi todos a acompañar a sus paisanos toreros en otra tarde primaveral de un atípico Carnaval, en el que el coso se ha llenado a reventar como pocas veces suele suceder en el festejo del Domingo por la tarde.

A Manuel "Diosleguarde" se le ha visto muy motivado, voluntarioso e incluso temerario con tal de agradar a esta afición que tiene depositada en el grandes esperanzas. Por un día aparcó su contrastada técnica y capacidad para torear con el corazón en una faena basada en la entrega y buen toreo al natural que incluso después del arrimón final, cuando su novillo echó el freno de mano, este le prendió propinándole una gran paliza. La buena estocada hace florecer los pañuelos y el presidente no tiene más remedio que conceder dos merecidas orejas, en lo que ha sido un final feliz para este chico que cumplía el sueño de torear en Carnaval delante de sus paisanos.

Había ciertas dudas por ver la capacidad de resolver de Valentín Hoyos cuando es sabido que no había matado ningún novillo en su corta carrera. Al albercano, siempre sonriente, no ha parecido pesarle la responsabilidad de torear en tan importante cita y a plaza llena. Enseguida hace un quite por Tafalleras al primer novillo y le abre los caminos al suyo por delantales. Con la muleta le baja la mano en un principio muy torero rodilla flexionada en lo que es una clara declaración de intenciones de que hay un torero con proyección. Se coloca muy de frente con mucha verdad y sufre la voltereta de rigor de la que se levanta enrabietado e incluso inspirado para terminar con tres soberbias tandas por el pitón derecho que calan, y mucho, en el tendido. Es la hora de matar y afloran los temores para todos excepto para El que se tira como un poseso sobre el morrillo del animal dejando un espadazo efectivo que le permite cortar otras dos orejas de ley serrana.

No le correspondía torear esta tarde a Carlos Domínguez Cabrera que ha sido uno de los gallos de Badajoz de este Bolsín. Cambiaba el turno por su paisano Ismael Jiménez que atendiendo a compromisos adquiridos con anterioridad toreará mañana. Si el torero pacense fuera capaz de torear con la diestra como lo hace con la zurda estaríamos hablando de palabras mayores. Lo ha demostrado en los tentaderos de estos fines de semana y lo ha vuelto a demostrar esta tarde en un par de tandas al natural de primoroso temple, empaque y remate. La faena bajó de tono cuando exprimido el bonito y bravo eral de Juan Manuel Criado le buscó las vueltas por el pitón derecho.Mata,al igual que sus dos compañeros, de un soberbio espadazo y el presidente tiene a bien concederle las dos orejas que ponen colofón a un más que entretenido y arropado festejo.

Reportaje gráfico: Adrián Martín