Formación e integración se aúnan en el proyecto impulsado por Cáritas Salamanca
Crear semilleros, preparar la tierra, plantar las semillas... y así hasta la recogida, comercialización y transporte de las frutas y hortalizas. Son parte de los trabajos que han aprendido y realizado desde el pasado mes de marzo los 8 participantes en el proyecto Paradisus, un nuevo recurso de inserción socio-laboral de Cáritas Salamanca vinculado a la agricultura ecológica y que se desarrolla en un huerto de 8.500 metros cuadrados (incluidos dos invernaderos) ubicado en Pelabravo. El proyecto, dirigido especialmente a personas en riesgo de exclusión o vulnerabilidad social y que se sustenta sobre los pilares de la formación y la integración, aprovecha el potencial de la agricultura ecológica como un destacado nicho de empleo, además de "estar absolutamente ligada a la economía social y al medio rural". "Priorizamos la formación a la producción", tal y como explican Álvaro Alonso, uno de los responsables del proyecto, y Elena Pérez, educadora social, quienes además aseguran que el balance del trabajo desarrollado hasta ahora es "muy positivo". Paradisus otorga la herramienta formativa esencial para desarrollar un trabajo productivo y tener un medio de vida digno.
Del huerto al mercado
"1.500 tomateras de 9 variedades diferentes, 300 pimenteras, 8 variedades de judías secas, tres de judías verdes, berenjenas moradas y blancas..." son solo algunas de las frutas y hortalizas cultivadas en el huerto de Paradisus y, cuya particularidad reside en que proceden del cultivo ecológico. Alimentos más naturales, sanos y nutritivos, porque la agricultura ecológica aprovecha los recursos naturales para, por ejemplo, combatir plagas, mantener o aumentar la fertilidad del suelo, etc., sin recurrir a productos químicos de síntesis como fertilizantes, plaguicidas, antibióticos, y similares, y en la no utilización de transgénicos. Alimentos de la tierra cada vez más demandados y que, por su forma de cultivo, encierran valores como el respeto con el medio ambiente, la conservación de ecosistemas o la biodiversidad.
Productos ecológicos que durante los sábados de octubre (de 10 a 15 horas) se podrán adquirir en el Mercado de San Justo, un espacio que volverá a convertirse en la que durante años fuera conocida como la Plaza de las Verduras. Un mercado que aúna la venta con la sensibilización sobre el consumo ecológico y el cuidado del medio ambiente. Entre los participantes se encuentran la asamblea de agricultores ecológicos de Salamanca, microbodega Versus, La Besana y La Verdolaga.