Un tótem con un reloj iniciará la cuenta atrás de los 1.000 días que restan hasta que concluya el evento el 31 de diciembre de 2018
El Patio de las Escuelas Mayores ha acogido hoy la inauguración del reloj del VIII Centenario, que iniciará la cuenta atrás de los 1.000 días comprendidos entre el 5 de abril de 2016 y el 31 de diciembre de 2018, fecha de cierre del programa de actividades del Octavo Centenario.
Este reloj se ubica dentro de un tótem conmemorativo instalado en el Patio de Escuelas Mayores, un paralelepípedo de base cuadrada, de 90 cm2 y 4 metros de altura. Cuenta con dos pantallas interconectadas que muestran el número de días, horas, minutos y segundos.
Este tótem contará además con un potente foco de gran alcance con lámpara de LED en su parte superior, que proyectará hacia el cielo un haz de luz uniforme a gran distancia.
En el acto, el rector, acompañado por el equipo de Gobierno, ha señalado que esta estructura marca "un nuevo hito, una nueva manera de que todos los salmantinos conozcan esta celebración y se sumen a ella".
Decíamos ayer, diremos mañana
El tótem que alberga el reloj de la cuenta atrás para el VIII Centenario está construido mediante una estructura tubular de acero laminado, con un peso total de más de 1.500 kg.
Las dimensiones de esta nueva estructura se definieron en relación a las proporciones del Patio de Escuelas y la referencia que supone la estatua de Fray Luis de León, de manera que consigue ser un elemento representativo sin sobrepasar a uno de los elementos emblemáticos del Patio de Escuelas.
El revestimiento exterior es de chapa de acero CORTEN, un material noble que se adecua perfectamente a la piedra característica de Salamanca por su textura y color. Además este revestimiento permite su exposición a la intemperie sin que se deteriore y tiene un envejecimiento que mejora con el tiempo.
El monolito incorpora los logotipos de la Universidad de Salamanca y de su VIII Centenario, así como un código QR que dirige a la web de la efeméride y una frase representativa: "Decíamos ayer, diremos mañana", alusiva a la cita que pronunció Fray Luis de León a su regreso a la docencia en el Estudio salmantino tras su encarcelamiento.
Fotos de Alejandro López