Ha realizado un análisis de las muestras recogidas en cuatro puntos del río Tormes los días 23 y 29 de febrero
El Ayuntamiento de Salamanca asegura, basándose en un informe del CIDTA (Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico del Agua) de la Universidad de Salamanca, que la espuma encontrada junto al puente Sánchez Fabrés no representa un problema de salud pública.
Así lo ha informado hoy, en la Comisión de Medio Ambiente, la concejala de Salud Pública y Medio Ambiente, María José Fresnadillo, quien ha detallado que el CIDTA ha realizado un análisis de las muestras recogidas en cuatro puntos del río el 23 y 29 de febrero después que hubiera estado lloviendo todo el fin de semana.
Este centro realizó medidas de nutrientes (fosfatos, nitratos, nitritos y amonio), materia orgánica (TOC, oxidabilidad, DQO), materia en suspensión y medidas in situ de los parámetros pH, oxígeno disuelto, turbidez y conductividad, así como de tensioactivos aniónicos (detergentes). Estos análisis complementan los realizados por Aqualia los días 15 de enero y 23 de febrero.
La aparición de la espuma ha estado motivada por el vertido de aguas de lluvia desde los aliviaderos de pluviales al río Tormes debido a las intensas lluvias registradas, observándose un aumento de los valores de fosfatos en las aguas del río.
El Consistorio actuará en un aliviadero de aguas pluviales situado entre el Puente Romano y el de Sánchez Fabrés para aumentar su capacidad de retención de agua y materia en suspensión de las primeras escorrentías.