CIUDAD RODRIGO | Llevaba cerrada desde el Puente del Pilar para que creciera sin problemas el césped plantado
La meteorología ha vuelto a dar un giro imprevisto en Ciudad Rodrigo en los últimos días, pasándose de la lluvia, el intenso frío e incluso la nieve del fin de semana a unas jornadas de martes y miércoles 'de primavera', aunque todavía falten algunas semanas para que entre esta estación. De este modo, por ejemplo, en la tarde del martes el Parque de La Glorieta estaba lleno a reventar de niños.
De cara a este anticipado tiempo primaveral, los mirobrigenses están 'de estreno': a partir de esta semana se puede volver a disfrutar de la isla de El Picón, que llevaba cerrada al paso de personas desde el mes de octubre, concretamente desde la víspera del Puente del Pilar.
Esa prohibición del paso de personas (para la cual se habían puesto vallas a lo largo del parking anexo a la isla, así como en la entrada al puente que da acceso por la Alameda Vieja) se implantó para que no hubiera problemas con el crecimiento del césped plantado en toda la isla dentro del proyecto de Custodia Medioambiental promovido por el Consorcio Transfronterizo de Ciudades Amuralladas.
Inicialmente, estaba previsto que la prohibición de acceso se prolongara hasta finales de 2015, pero como al fin y al cabo El Picón no es de mucho uso en los meses invernales, se quiso favorecer un mejor crecimiento del césped prolongando el cierre hasta la época en la que verdaderamente empieza a ser usado de nuevo, aunque solo sea para pasear.
La principal diferencia respecto a la situación de la isla de El Picón antes de procederse al replantado del césped es que ahora luce completamente verde, al 'borrarse' las zonas de paso más habituales (por ejemplo, la que hay paralela al agua). Asimismo, también está llena de césped la zona donde suelen jugar los niños más pequeños junto al agua.
Como es lógico, una vez se vuelva a usar regularmente, esas zonas volverán a perder el césped, que a partir de ahora será regado con el nuevo sistema de riego automático colocado entre finales de septiembre y principios de octubre, justo antes del replantado del césped.
Además del nuevo look del césped, con la reapertura de la isla también se puede apreciar que ha desaparecido parte de la vegetación, especialmente en el extremo de la isla más cercano a la antigua fábrica de harinas de La Concha, donde los viejos árboles que había (uno de los cuales se venció sobre el parking en septiembre) han dado paso a unos nuevos arbolitos. Asimismo, también se han plantado nuevos árboles en los laterales del paseo creado desde el segundo parking de La Concha hacia el Puente Mayor.
Precisamente, la creación tanto de ese camino como del parking también estuvieron englobadas en el proyecto de Custodia Medioambiental, ejecutado por la empresa Manuel Jesús Sánchez Blanco. De este proyecto forman parte además la deforestación de la Alameda Vieja, la creación en la misma de un nuevo camino, y la colocación de un pantalán para piraguas en el Canal de La Concha.