El prestigioso servicio de estudios del BBVA advierte de que la indecisión de los pactos gubernamentales introduce inestabilidad
La fragmentación del parlamento y sus consecuencias en la constitución de un gobierno afecta al crecimiento económico. La incertidumbre sobre la política económica española alcanzó en enero sus niveles más altos, sólo comparable a la que existió con la guerra de Irak, y está restando crecimiento a España, según el servicio de estudios del BBVA. Si la incertidumbre desaparece pronto el impacto en el crecimiento será de dos décimas este año y tres décimas el próximo; pero si se mantiene en esos niveles máximos durante seis meses, la economía española perdería medio punto de crecimiento este ejercicio y hasta 1,3 puntos porcentuales en 2017. BBVA Research prevé que el PIB aumente en España un 2,7% tanto este año -donde ya han incorporado el menor impulso por la incertidumbre actual- como el que viene; sin embargo, en el peor de los casos, la economía española crecería sólo el 2,2% este año y apenas el 1,4% en 2017. Un efecto que también se notaría en el empleo en una proporción incluso superior. Si la incertidumbre cercenará en medio punto el PIB, el crecimiento del empleo se vería minorado en al menos seis décimas, de acuerdo con las estimaciones.
El índice elaborado por el servicio de estudios del BBVA -siguiendo el modelo de unos investigadores estadounidenses- no se refiere a la incertidumbre política general, sino exclusivamente a la que puede existir respecto a la política económica y se determina en base a los artículos publicados en periódicos españoles que incluyen las palabras "incertidumbre, política y economía", según informa El Norte de Castilla.
Pero los riesgos no se centran sólo en la incertidumbre política, la volatilidad de los mercados es otro de los elementos que más impacto negativo puede tener. "Tenemos que tomarnos con cierta seriedad lo que está pasando en los mercados", explicó Jorge Sicilia, Economista jefe del grupo BBVA y director de BBVA Research, en la presentación del 'Informe Situación España. "No conviene minimizarlo porque puede generar problemas al afectar a la confianza y al consumo". Una caída trimestral del 10% de la riqueza financiera neta -muy relacionada con las cotizaciones bursátiles- provocaría una caída de un punto en el consumo y en una proporción equivalente del PIB, apuntó Rafael Domenech, economista jefe de Economías Desarrolladas del BBVA Research. En lo que va de año, el Ibex 35 ha caído un 15%.
España, no obstante, sigue teniendo vientos de cola "pero soplan con menor intensidad", señaló Domench. Entre esos vientos de cola, la reducción del precio del petróleo puede aportar un punto adicional de crecimiento en 2016 y hasta 1,5 puntos en 2017.
Las bolsas están descontando un deterioro de la economía mundial, por las dudas sobre China, la brusca caída del precio del petróleo, los riesgos geopolíticos y el temor a un frenazo en Estados Unidos. Para los analistas de BBVA Research, los mercados están "sobrerreacionando". "Pero no se puede descartar, advirtió Sicilia, que se entre en una espiral y que las economías acaben deprimiéndose. Hoy no es nuestro escenario, pero el riesgo aumenta a medida que crece la volatilidad", concluyó.