Estudiantes extranjeros en su mayor parte, que celebraban una fiesta de despedida y que abandonaron el inmueble sin incidentes
Las protestas de los vecinos de un inmueble ubicado en la calle Prado debido a los ruidos procedentes de una vivienda, determinó el desalojo de la misma por parte de la Policía Local. En su interior se encontraban 35 personas, estudiantes extranjeros en su mayor parte, que celebraban una fiesta de despedida y que abandonaron el inmueble sin incidentes. Los hechos ocurrieron a la 1.39 horas del viernes, día 29.
Los agentes locales efectuaron tres mediciones en el dormitorio de un domicilio aledaño, que arrojaron valores de 35, 34 y 33 decibelios, siendo el máximo permitido por la ordenanza en vigor de 27 decibelios. La Policía Local filió a cuatro personas como arrendatarios responsables del piso denunciado, que afrontarán las sanciones que se deriven de los hechos citados.