El MAGRAMA estima que en la campaña 2014 el sector obtuvo unas pérdidas de 427 euros por hectárea, por lo que aboga por un aumento del 0,6% de las plantaciones
Antes del próximo 1 de febrero, el Ministerio de Agricultura Alimentación y Medio Ambiente tiene que publicar oficialmente la resolución sobre el porcentaje de autorizaciones de nuevas plantaciones de viñedo para 2016. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) rechaza el aumento de 0,6% (cerca de 6.000 hectáreas) fijado por el MAGRAMA. Desde esta organización se aboga por un mínimo incremento del 0,2% (1.900 hectáreas), orientado principalmente a los jóvenes agricultores profesionales, con el objetivo de incentivar el relevo generacional en el sector.
"Hemos pedido al Ministerio máxima prudencia ante el nuevo sistema de autorizaciones de plantación de viñedo ya que no conocemos la dinámica que mantendrá el sector ni el impacto de las nuevas autorizaciones. Además, lamentamos que los criterios marcados por el Ministerio de Agricultura para establecer la prioridad en la concesión de nuevas autorizaciones penalicen a los viticultores profesionales, especialmente a los jóvenes", ha subrayado Joaquín Vizcaíno, responsable del sector vitivinícola de COAG.
La normativa vigente da prioridad en la concesión de autorizaciones de plantación a menores de 40 años que no cuenten con viñedo a su nombre. Para COAG es especialmente injusta la situación que sufren los agricultores jóvenes: si antes se les obligaba a contar con cierta cantidad de viñedo para recibir las ayudas de Primera Instalación, el nuevo sistema les penaliza a la hora de recibir nuevas autorizaciones si previamente tienen viñas a su nombre.
Un contexto que no invita a un crecimiento desordenado
Desde la COAG sostienen que siempre ha defendido un crecimiento ordenado y regulado de la superficie de viñedo en España, como manera óptima de mantener un equilibrio entre oferta y demanda que garantice las rentas de los viticultores.