Un interno prendió el colchón de la celda de aislamiento y tuvo que ser hospitalizado y varios funcionarios resultaron intoxicados
El sindicado ACAIP denuncia el rechazo a algunas de las medidas implantadas desde la llegada de José Luis Castejón, director del centro peniteniario de Topas, por las que se obliga a sentarse a los internos de una determinada forma en los comedores de los módulos y a los trabajadores a ordenar mediante palmadas que se sienten. "Entendemos que dicha medida es innecesaria y está generando situaciones de crispación innecesarias, que ya han ocasionado incidentes regimentales por parte de internos, que han puesto en peligro la integridad física de trabajadores del centro. Queremos dejar claro que no estamos en contra de la disciplina que debe de existir, pero pensamos que debe de producirse en su justa medida y siempre de forma ponderada para evitar tensiones innecesarias. Esta circunstancia le ha sido comunicada a la dirección del centro en diferentes reuniones en las que la mayor parte de los sindicatos nos hemos posicionado en contra de las mismas".
El último incidente, explica ACAIP, se producía el pasado día 15 de diciembre, cuando al reparto del desayuno el Subdirector de Seguridad ordenó a un interno del módulo 6 a sentarse al fondo del comedor en presencia del resto de internos del módulo. El interno respondió tirando la taza del desayuno al suelo, motivo por el que se ordenó su traslado al departamento de aislamiento previo cacheo. Estando realizando dicho cacheo el interno comenzó a golpear violentamente paredes, cristales, etc., en el cuarto donde se estaba llevando el cacheo con una silla con las patas de hierro. Afortunadamente no logró golpear a ningún trabajador".
El pasado jueves, prosigue ACAIP, "el citado interno prendió el colchón de su celda, que ocasionó el bloqueo de la puerta y abundante humo en el departamento de aislados. El incidente obligó a actuar a los trabajadores de servicio en dicho módulo que, gracias a su actuación, así como al del personal de mantenimiento, pudieron abrir la puerta evitando que pudiese haberse sufrido algún daño mayor a personas e instalaciones. Como consecuencia del humo que se generó se debió de trasladar al resto de internos al patio para evitar que pudiesen intoxicarse, varios trabajadores debieron acudir a la enfermería del centro y el propio interno debió ser llevado al hospital de Salamanca, donde pasó la Nochebuena. La celda y la galería donde se produjo el incidente ha quedado dañada por el humo".
ACAIP se ha opuesto, y así se le ha comunicado en reiteradas ocasiones a la dirección, "a la colocación en dichas galerías de varias cancelas de apertura manual tras las puertas mecanizadas, debido al peligro que conlleva ya que en el caso de incidentes de este tipo, con la posible quema de unn colchón junto a la puerta, se dificultaría o imposibilitaría la apertura de la misma al crecer el hierro con el calor. Hecho que retrasaría su apertura y podría dar lugar al fallecimiento del interno que estuviese en su interior. La medida fue instalada inicialmente en varias celdas de aislamiento y la dirección quiere repetirla en el departamento de enfermería".