Un año sin el Árbol Gordo

Este jueves 19 de noviembre se cumple el primer aniversario de una triste jornada para todos los mirobrigenses: el día en que se dijo adiós de forma definitiva al genuino Árbol Gordo.

La despedida a este olmo negrillo había comenzado unos dos meses antes, a finales del mes de septiembre, cuando la progresiva inclinación del Árbol hizo necesaria una primera poda de sus ramas para evitar que cayeran sobre los peatones o incluso sobre vehículos.

En aquel momento, ya estaba decidida la retirada completa del Árbol, al que se había intentado conservar durante varios lustros con diferentes intervenciones tras secarse por culpa de la grafiosis (como echar en su interior rellenos artificiales), pero la estructura había ido inclinándose peligrosamente.

Tras la retirada definitiva, hubo que esperar un par de semanas para la colocación de otro árbol en su lugar, que pasó a ser conocido como el Árbol Flaco por su forma. Este Árbol no llegó a asentar bien, y acabó secándose también, teniendo que ser retirado el pasado mes de septiembre, cuando no llevaba ni 10 meses en el lugar mientras que su antecesor estuvo cerca de dos siglos (se tiene constancia de la plantación de olmos negrillos en la zona en 1816).

Pese a estar colocado ese breve período de tiempo, el Árbol Flaco fue testigo de la celebración del histórico ascenso del Ciudad Rodrigo Club de Fútbol a Tercera División el pasado mes de mayo.

Justamente esta semana, la Junta de Portavoces del Ayuntamiento ha acordado, tras consultar previamente a la ciudadanía, que sea una encina el árbol que pase a ocupar ese emblemático espacio en las próximas semanas, para lo que se entrará en contacto con viveros o con empresas especializadas. Hasta el día en que el nuevo árbol sea colocado, Ciudad Rodrigo sigue 'huérfana' de Árbol Gordo.