Con 11.575 millones en los tres primeros trimestres, se espera que el año acabe superando al menos los 16.000 millones
Era de esperar, el mercado on-line en España no sólo se consolida sino que no para de crecer. Hemos tardado más, pero parece que los españoles cada vez estamos más dispuestos a comprar en línea.
Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia "las ventas online en España sumaron 11.575 millones de euros en los tres primeros trimestres de 2015". Se espera que el año acabe superando al menos los 16.000 millones euros. De 2014 a 2015 el consumo on-line habrá crecido entre un 11 y 18 %, afirman los expertos.
Según un estudio del IAB, el gasto medio de un español en compras on-line son unos 700 euros anuales, cifra que aún se sitúa bastante por debajo que nuestros vecinos europeos.
¿Y qué lleva a los españoles a comprar, y por tanto confiar más en mercado on-line? En este orden: el ahorro, la comodidad, la recomendación o porque es un producto o servicio que sólo se puede adquirir on-line. ¿Y desde dónde compramos? Más del 90 % de las compras se realizan en la intimidad de nuestros hogares y sólo el 30% compran desde sus puestos de trabajo.
Para pagar preferimos hacerlo con tarjeta de crédito o débito, mientras que sólo el 25% elige hacerlo mediante intermediarios de pago. Lo que más compramos son billetes de transporte, ropa, complementos y artículos deportivos. También utilizamos los portales y tiendas en línea para reservar alojamientos y comprar entradas de espectáculos.
Las Apps siguen creciendo pero el pago aún se resiste. Sólo el 30% de los encuestados pagan por aplicaciones para tabletas o móviles, y si lo hace son por aquellas que sirvan para el entretenimiento. Y aunque la navegación móvil crece, sólo el 17,8% de los que compran por Internet lo hacen a través de dispositivos móviles. Aunque previsiblemente el mercado cambiará en un corto periodo de tiempo.
El perfil del comprador, según el estudio del Ministerio de Industria, Energía y Turismo sobre el Comercio Electrónico B2C del 2014, se diversifica y perfila entre los 25 y 49 años. La mayoría viven en entornos urbanos de más de 100.000 habitantes y destacan las mujeres entre 35 y 49 años.
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