Alcaldes de las zonas de Vitigudino, Ledesma y La Fuente rechazan la Ordenación del Territorio

El delegado territorial de la junta de Castilla y León en Salamanca, Bienvenido Mena, se reunió este jueves en Vitigudino con alcaldes de las zonas de Vitigudino, Ledesma y La Fuente de San Esteban al objeto de explicarles el nuevo modelo de gestión del territorio que trata de implantar la Junta mediante la Ley de Ordenación del Territorio, y al mismo tiempo sugerirles que se encuentran en plazo para presentar cuantas alegaciones consideren oportunas al borrador del mapa de zonificación en el que queda integrado cada uno de los municipios.

Antes de entrar en el debate con los alcaldes en esta primera de las cinco reuniones que mantendrá con representantes municipales en el resto de la provincia, Mena señaló que el objetivo de la ley es garantizar los servicios básicos en las zonas rurales, asegurando que ninguno de los municipios actuales desaparecerá y que cada uno de ellos mantendrá sus competencias, que objetivo final de la Ley es "optimizar los recursos" mediante la asociación voluntaria en las denominadas Mancomunidades de Interés General, y que ningún municipio será "castigado" si decide no incorporarse.

Además, explicó que el modelo de zonificación mediante las Unidades Básicas de Ordenación (UBO), responde a las actuales zonas básicas de salud, sin cambios significativos, aunque en cualquier caso, "se pueden asociar con otros más cercanos para atender las necesidades de los ciudadanos" mediante las Mancomunidades de Interés, y aunque no podrán pertenecer a dos de estas mancomunidades al mismo tiempo, sí podrán pertenecer a una de las mancomunidades actuales por razón de prestación de servicios y a una Mancomunidad de Interés General (MIG) por el mismo motivo. Un caso evidente a este respecto sería el que sucede actualmente con la Mancomunidad Cabeza de Horno, encargada de la gestión del agua en la red general, y las actuales mancomunidades para la recogida de residuos urbanos, entre otros servicios.

Aclarados los objetivos y pretensiones de la Ley de Ordenación, cuyo desarrollo deberá contar con el consenso de dos tercios de los integrantes de la Cámara de las Cortes regionales, los alcaldes tomaron la palabra para mostrar sus dudas sobre la eficacia, no de la Ley para la preservación de servicios básicos como sanidad y educación, sino sobre el verdadero cometido de las Mancomunidades de Interés General, especialmente si se tiene en cuenta que la Ley no impide el funcionamiento de las actuales mancomunidades y las otras, y que ambas entidades supramunicipales gozan de las mismas competencias, lo que en opinión de algunos sería crear aún una mayor duplicidad de los recursos para su gestión.

Esto, en palabras del alcalde de Peralejos de Abajo y presidente de la Mancomunidad de Vitigudino, Alfonso Castilla, refiriéndose a los responsables de Administración autonómica, "se han metido en un charco del que no saben cómo salir y como si no tuvieran cosas más importantes que hacer", pues hasta el momento se desconoce un tema tan importante como es "la financiación" de esas nuevas entidades, especialmente cuando hay cambios más o menos sustanciales en cuanto a los municipios que puedan integrarse en ellas.

A cuestiones planteadas respecto a las competencias de las MIG y el futuro del patrimonio de las actuales mancomunidades en el caso de disolución, el delegado de la Junta y el secretario territorial informaron que las primeras serán las que quieran asumir las MIG, y en cuanto al patrimonio de las segundas, su futuro se encuentra recogido en la jurisprudencia del derecho civil. Asimismo, Mena reiteró el carácter voluntario de agrupación, además de señalar ?en cuanto a financiación? que la Junta sacará una línea de ayudas con este objetivo.

Por su parte, el alcalde de Doñinos de Ledesma. Eusebio Fernández, criticó duramente varios aspectos del borrador de mapas de zonificación, tanto por su nomenclatura, en el caso de 'Hoces' para la zona de Las Arribes, así como por la imposición de género ambiguo para este sustantivo cuyo origen etimológico emana de sustantivos femeninos, además por los criterios que han dado pie a la partición de la histórica comarca de Ledesma en tres unidades básicas de ordenación (UBOs), en algún caso con una población agrupada cuyo escaso número (3.589 habitantes) y la baja densidad de habitantes por kilómetro cuadrado (5,28 h/Km2) no garantiza su futuro. Este es el caso del llamado Campo de Ledesma.

El alcalde de Hinojosa de Duero y diputado provincial del PSOE por la comarca de Vitigudino, José Francisco Bautista, sugirió al delegado que "lo que necesitamos son soluciones a los problemas y no liarnos con los tenemos", y reiteró las palabras del regidor de Pereña cuando señaló que "el problema que tenemos no es de ordenación sino de despoblación".

También el alcalde de Vitigudino, Germán Vicente, realizó varias preguntas, alguna de ellas bastante concreta y que hacía referencia al futuro de los servicios que actualmente prestan las cabeceras de comarca tales como el Catastro, Sanidad, etc. A este respecto, Mena reiteró que se mantendrán como en la actualidad. Pero si hubo una pregunta que levantó los murmullos en el salón de actos del Centro Cultural fue la relacionada con la representatividad de los municipios en las MIG, aspecto este que deberán decidir los municipios agrupados y hacer constar en sus estatutos de régimen interior y funcionamiento. El 'run, run' de la sala sobrevino cuando Vicente señaló esta cuestión como el motivo por el que el Ayuntamiento de Vitigudino decidió su segregación de la Mancomunidad, argumento utilizado de cara al exterior, al menos en los últimos años, pero sobre el que subyacían rivalidades de poder político.