La Virgen del Rosario, anfitriona de 'Teresa, la jardinera de la luz'

En plenas fiestas del Rosario, Santibáñez de Béjar recibió ayer, viernes, a los componentes del grupo de teatro 'Lazarillo de Tormes' de la ONCE y a su ya exitosa obra Teresa, la jardinera de la luz, escrita y dirigida por Denis Rafter, con el mismo entusiasmo y entrega que los actores representaron su obra para ellos.

La gente de la localidad se regalaba en sus fiestas la representación de este montaje teatral; y así para recibir al grupo que la pondría en escena, abandonaron por unas horas todo lo relacionado con su patrona para atender a los que de alguna forma iban a colaborar para agasajarla. El párroco se apresuró en dejar por un momento la ermita y a su Virgen del Rosario por unos momentos para saludar al grupo y darles la bienvenida, antes de correr presuroso a rezar el rosario en la ermita para luego ir presto a ver la representación teatral. Mientras otro grupo de vecinos, con su alcalde y demás responsables del pueblo y sus fiestas colaboraron estrechamente en todo lo necesario para llevar a cabo el montaje.

La iglesia se llenaba a las 20.00 horas con vecinos de todas las edades, que aplaudieron encantados ante el descubrimiento de la historia, de la gran figura de esta mujer andariega, Teresa de Jesús con la sensación de que la propia santa había llegado realmente a su pueblo presentada por el grupo de hermanas carmelitas que de forma vehemente la dan a conocer a través de esa defensa entregada que hacen de ella ante un inquisidor que quiere denostarla sin conseguirlo. Sin darse cuenta apenas todos los espectadores descubren a una mujer, humana como ellos que gracias a un amor divino transmite vida, generosidad, entrega, además de unos hermosos poemas y una historia llena de obras hechas para los demás. Y es que una vez más el teatro consigue poner en comunicación lo divino y lo humano. La oración catártica de un rosario, la plegaria de unas oraciones, dan paso a un ejemplo de vida llevada a la escena para todos en una obra de teatro: Teresa, la jardinera de la luz, que vuelve a cumplir con un cometido que la hace triunfar: llegar a todos aquellos de los que de ella disfrutan.

Una iglesia, el mejor de los escenarios con su arte secular entre sus muros; unas mujeres de hace cinco siglos, monjas por más señas las más oportunas de las artistas para dar a conocer al mundo de cualquier época que lo grande empieza en la tierra de la mano de los más invisibles, como le pasó en una ocasión a otra niña de Nazaret, que con un rosario en las manos es alabada en los altares de muchos pueblos. ¡Felices fiestas! de vuestra Señora del Rosario de Valparaíso, habitantes de Santibáñez de Béjar.