Silencio e indiferencia

Este último domingo día 27, y desde entonces acá, el debate público parece ser monotemático: las elecciones catalanas. El domingo por la tarde era imposible encontrar alguna cadena de radio o televisión en la que no se hablara de fútbol o de las marcha de las votaciones en Cataluña. ¿Temas importantes? Sí, pero hombre hay otros. Lo que más me ha sorprendido es que ¿sabes ustedes cual fue el programa más visto en televisión la tarde-noche de ese día?: Gran Hermano. ¿Increíble? Pues eso es lo que dice el estudio de audiencias.

Mientras esto sucedía en este querido, pero desconcertante, país que llamamos España, los Jefes de Estado y Presidentes Gobierno asistían a la Cumbre de las Naciones Unidas para la aprobación de la Agenda del Desarrollo después de 2015. Agenda, de la que poco sabemos ya que parece no ser tema de interés ni para los medios de comunicación ni para el gran público, a pesar de afectar directamente al futuro de miles de millones de personas en todo el mundo.

En palabras del Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon: Ahora debemos construir sobre estos cimientos. Si queremos mejorar, debemos obrar de manera diferente. La Agenda 2030 nos obliga a trascender las fronteras nacionales y los intereses a corto plazo para actuar con solidaridad a largo plazo. Ya no podemos seguir pensando y trabajando de forma aislada.

Mi querido amigo Marco Gordillo, Vocal de Incidencia Política en la Coordinadora de ONG de Desarrollo de España lamenta que "Durante los tres años en los que ha estado construyendo la agenda, el enfoque de derechos ?que al principio era fuerte? se ha ido rebajando. Prácticamente han desaparecido. Solo en dos de los 17 objetivos aparece la palabra derecho". Y advierte: Corren tiempos en los que declaraciones y hechos políticos tienden a avanzar por caminos opuestos[1].

El gran desafío de este siglo, no es que el Real Madrid o el Barcelona ganen más copas de Europa, que Fernando Alonso encuentre por fin el coche de sus sueños, que Cataluña se independice como país o termine siendo un nuevo "continente", asunto este que no sé si entrará en los planes de Artur Mas. Tampoco es el desafío de este siglo saber cuándo ingresarán en prisión los expoliadores de las arcas públicas o saber quién será el concursante ganador de las próximas ediciones Gran Hermano. El gran desafío de este siglo es precisamente la defensa de los derechos humanos. Y darle una respuesta adecuada a este desafío pasa por solucionar el problema de los refugiados sirios, restablecer los derechos civiles, inmolados en el altar de la crisis económica, a miles de personas; el desafío es acabar con las desigualdades entre países y en el interior de los mismos, es disponer de leyes justas y en tiempo que castiguen a los culpables. Y es que, como titula su artículo mi amigo Marco: Los derechos humanos serán universales o no serán.

A todos nos va la vida en ello, tal no la nuestra pero seguro que la de nuestro hijos o nietos. Dar solución a la impune con la que actúan aquellos que violan a los derechos humanos y campa a sus anchas, es sin duda un problema de gran magnitud, gigantesco, pero posibles de resolver, todos sabemos lo hace falta. Hacemos falta todos y cada uno de nosotros. Erich Fromm, destacado psicoanalista, psicólogo social y filósofo humanista de origen judío alemán, escribió en su libro Miedo a la libertad, cuando reflexionaba sobre cómo afectan los grandes problemas a las personas:.. producen desconfianza en los individuos con respecto a sus propias capacidades para pensar sobre aquellos problemas que realmente le interesan. Se debaten impotentes ante una masa caótica de datos y esperan con paciencia patética que el especialista halle lo que debe hacer y dónde se debe dirigir. Y el agudo escritor portugués José Saramago nos advertía: Somos la memoria que tenemos y la responsabilidad que asumimos, sin memoria no existimos, sin responsabilidad tal vez no merezcamos existir. ¿Lo merecemos?.

Por cierto ¿sabes ustedes cuáles son los Objetivo de Desarrollo Sostenible aprobados el último fin de semana por la Asamblea General de las Naciones Unidas? ¿Les interesan?