Un grupo de caballistas expresa al alcalde su malestar por el Bando

El Pleno Ordinario celebrado por el Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo en la noche del jueves tuvo unos espectadores inesperados. Unos minutos después de que se marcharan del Salón de Plenos un grupo de trabajadoras de la limpieza de los inmuebles municipales, llegaron hasta allí un grupo de aficionados al mundo del caballo, nada más concluir una reunión que habían mantenido.

Esta reunión se había convocado con carácter de urgencia tras conocer el Bando emitido en la jornada del miércoles por el alcalde Juan Tomás Muñoz, a partir del cual se prohíbe el tránsito de caballos y otros equinos por el recinto amurallado de Ciudad Rodrigo por cuestiones de limpieza (salvo carruajes y enganches durante la Feria del Caballo, y otras excepciones puntuales).

El citado grupo de caballistas rechaza de lleno esta medida, y por ello, elaboraron un escrito con la intención de hacer cambiar de opinión al Equipo de Gobierno. En ese texto exponen que no pueden "comprender cómo desde la propia institución organizadora de la XV Feria del Caballo se pretenda boicotear la misma".

Desde el punto de vista de estos caballistas "es más que evidente un contrasentido" que en una Feria "en la que se pretende realzar la vinculación de esta tierra con este bello animal" se pongan en marcha actuaciones de este tipo "por parte de un equipo de gobierno que se autodenomina 'progresista y abierto al diálogo', y que no hace otra cosa que con sus propios actos desacreditar sus palabras".

Los caballistas continúan manifestando que actuaciones como el Bando "no hacen otra cosa que menoscabar y desacreditar una serie de actuaciones que se han venido realizando por los diferentes grupos" con el fin de realzar la figura del caballo. Ante ello les piden en el escrito que reconsideren y anulen el Bando "y si así lo estiman oportuno emitan un nuevo bando reordenando la circulación de caballos y carruajes de una forma más adecuada y teniendo en cuenta también las consideraciones de los usuarios y ciudadanos de esta ciudad".

Ramón Sastre preguntó sobre la materia en el Pleno

Los aficionados al caballo que acudieron al Salón de Plenos no pudieron intervenir durante el mismo al no haber solicitado previamente el poder realizar una pregunta, pero en su lugar, el concejal del PP, Ramón Sastre, preguntó al Equipo de Gobierno por qué se había tomado esa medida "a tres días de la Feria, y sin consultar".

El alcalde Juan Tomás Muñoz expresó que creen que "tiene que regularse el tráfico" [de caballos], añadiendo que la prohibición ha tenido su origen en las quejas de varios hosteleros del centro histórico, molestos por los problemas que acarreaban los caballos en materia de higiene, dándose situaciones que habían generado incluso amenazas. El alcalde manifestó literalmente que "no podemos tener un barrendero detrás de cada caballo".

Según amplió Juan Tomás Muñoz, se está trabajando en una Ordenanza Municipal que regule todos los supuestos. Ramón Sastre replicó que la Feria del Caballo es "sólo un fin de semana al año", creyendo que "no causaría problemas".

Concluido el Pleno, los caballistas departieron durante unos instantes con Juan Tomás Muñoz para hacerle ver directamente su desacuerdo con la medida adoptada.